El presidente electo de Ecuador Guillermo Lasso se reunió en Colombia con Iván Duque, y ahí dejó servida una declaración que fue su mejor obsequio oficial: justificó el bombardeo neogranadino a territorio ecuatoriano en 2008 como una maniobra en “defensa de su seguridad”.
La expresión generó el reproche del exmandatario Rafael Correa, quien remarcó lo dicho por Lasso como la conclusión increíble de un presidente electo que debería tener como misión defender la integridad de su país.
Desde su Twitter, Correa escribió: “¡Increíble! ¡Un presidente electo que defiende bombardeo a su Patria!».
¡Increíble! ¡Un presidente electo que defiende bombardeo a su Patria!
Con el argumento de “defensa de la seguridad”, podríamos entonces bombardear Colombia cuando secuestren a nuestros periodistas allá.
Realmente, ¡increíble!
Abrazo, hermanos colombianos, y que cese la violencia https://t.co/p4CjrTvzf8— Rafael Correa (@MashiRafael) April 21, 2021
Relaciones en tensión
En 2008, durante el gobierno de Uribe, Colombia bombardeó un campamento del excomandante de las FARC Raúl Reyes en territorio ecuatoriano.
Durante el operativo fue abatido el líder guerrillero y varios ecuatorianos. Esto provocó una tensión entre ambos gobiernos que se resolvió gracias a los oficios de la UNASUR.
Correa agregó en su mensaje que: “Con el argumento de “defensa de la seguridad”, podríamos entonces bombardear Colombia cuando secuestren a nuestros periodistas allá”. Y remató diciendo otra vez: “Realmente, ¡increíble!”.
«Estado de necesidad»
Para Lasso, el operativo colombiano en territorio ecuatoriano no tuvo intenciones de dañar a Ecuador: “Operativos como el sucedido en el año 2008, son operativos evidentemente que conforman la figura del estado de necesidad. Yo creo que en ningún caso existió el interés del gobierno colombiano del momento de invadir Ecuador, simplemente de actuar en defensa de su seguridad”.
Consultado si su gobierno estaría dispuesto a consentir un procedimiento similar en caso de confirmarse presencia de campamentos de grupos disidentes en su territorio, Lasso no se aventuró a responder lo mismo, y se comprometió a estrechar la cooperación con Bogotá.