Las causas por la sucesión de Maradona y por las responsabilidades en la muerte del astro dieron pasos adelante en las últimas horas. Los 5 hijos reconocidos por el jugador se pusieron de acuerdo y designaron como administrador de la sucesión al abogado Sebastián Baglietto, ligado a Dalma y Giannina. El visto bueno lo dieron también Diego junior, que vive en Nápoles, y Mario Baudry que representa Dieguito Fernando, el hijo que Maradona tuvo con Verónica Ojeda. La que se manifestó en contra fue Jana, pero mañana se presentaría a la justicia para unirse a los demás. El visto bueno lo debe dar la jueza. En la causa penal, mientras tanto, en la toxicología no habría rastros ni de alcohol ni de cocaína. Se espera para la semana próxima el análisis de la medicación encontrada en el cuerpo del Diez.
Como anticipó este diario, la sucesión quedará radicada en La Plata porque en las inmediaciones de la capital bonaerense vivió Maradona los últimos meses de su vida. En principio, intervendrá la jueza Luciana Tedesco del Rivero, titular del juzgado 20 de La Plata. Con el visto bueno de los cinco herederos reconocidos por Diego se supone que quedará firme que la sucesión trámite en La Plata; y que la magistrada homologará a Baglietto como administrador, aunque podría designar a alguien de su confianza. Sería extraño, pero la ley le da cierto margen.
La confluencia de los herederos permitirá acelerar los procesos y tal vez logre destrabar las urgencias: los pagos que ya hacía mensualmente el Diez, en esencia, prepagas de salud de sus familiares, seguros, sueldos, líneas de celulares y otros gastos. También podría avanzarse en el acceso a las cuatro cuentas bancarias; tres a nombre de Maradona y una conjunta entre El Diez y Matías Morla. Esas cuentas están en Dubai y Suiza, aunque hay alguna que estaba en Mónaco y ahora no está clara la radicación.
La lógica indica que Morla, administrador de Maradona en toda la última época, tendrá que presentar una rendición de cuentas; lo que incluye la enumeración de los bienes del astro. Eso va a constituir la base de la sucesión. Los herederos, por su parte, pueden denunciar en el juzgado otros bienes que conozcan o de los que tengan noticias.
Morla, a través de su abogado Mauricio D’Alessandro, ya hizo saber que las marcas que remiten a Maradona –Diego Armando Maradona, Diegol, la mano de Dios, D10S y tantas otras- son propiedad de la empresa Sattvica, que preside el propio Morla y en la que tiene acciones su cuñado, Maximiliano Pomargo. El letrado hizo público que entregará la mitad del producido por los derechos de las marcas Maradona a las hermanas del astro. Todo esto obviamente llevará a una batalla judicial ya que las hermanas no son herederas, pero al mismo tiempo Morla insiste en que las marcas no eran de Maradona sino que fueron vendidas/cedidas a la empresa que él preside. Habrá que ver si el conflicto se resuelve por las buenas, en una negociación, o en la justicia penal con denuncias cruzadas.
En San Isidro, donde se instruye la causa por la muerte de Maradona, los fiscales habrían recibido un adelanto de la toxicología; acotada únicamente al alcohol y drogas prohibidas. El adelanto indicaría que no se encontró ninguna de esas sustancias, algo que ya preveían los fiscales comandados por John Broyard. Es que en la casa de Tigre no había bebidas alcohólicas ni drogas de ningún tipo.
Sin embargo, lo más trascendente será el estudio de los medicamentos que había en el cuerpo de Maradona. Todo indica que le suministraban fármacos que eran contraindicados a sus afecciones cardíacas, lo que consolidaría la idea de los fiscales de que hubo grave negligencia. El sistema era que la psiquiatra indicaba medicación a las enfermeras, pero Maradona no les permitía el ingreso a la habitación, por lo que la medicación le era suministrada por el sobrino y el secretario. Nadie sabe si eso realmente se cumplía y en cualquier caso si se tuvieron en cuenta los riesgos cardíacos.
Publicado en pagina12.com.ar
Escrito por Raúl Kollmann