El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el pasado 20 de abril que firmará una orden ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración hacia Estados Unidos, debido a la pandemia del nuevo coronavirus que afecta al país.
A través de su cuenta Twitter, el mandatario estadounidense publicó:
«A la luz del ataque del Enemigo Invisible, así como la necesidad de proteger los empleos de nuestros GRANDIOSOS ciudadanos estadounidenses, ¡firmaré una orden ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración a los Estados Unidos!», aunque no especificó sobre la duración de esa medida, ni la fecha en la que se firmaría dicha orden ejecutiva.
In light of the attack from the Invisible Enemy, as well as the need to protect the jobs of our GREAT American Citizens, I will be signing an Executive Order to temporarily suspend immigration into the United States!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) April 21, 2020
Ante esta decisión, organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes reaccionaron de forma inmediata señalando que Trump y sus asesores están valiéndose de la pandemia de coronavirus para impulsar agresivas políticas de inmigración. Además, están convencidos de que esta orden ejecutiva será desafiada en la Corte de Justicia.
Paul Wright, vocero del Centro de Defensa de los Derechos Humanos, expresó que «hay muchas razones, tanto por razones humanitarias como la reunión con las familias, gente que tiene trabajos que se pueden ver afectadas, y otras razones para viajar y emigrar a los estados Unidos».
El abogado Charles Kuck, del bufete especializado en inmigración Kuck Baxter, dijo en Twitter «Esto es completamente loco y no será confirmado por los tribunales supremos». Igualmente expresó a través de la red social que «Al emitir esta «Orden ejecutiva», Trump está impidiendo que decenas de miles de cónyuges de ciudadanos estadounidenses ingresen a los Estados Unidos. Literalmente manteniendo a las familias separadas».
This is completely Nuts and will not be upheld by the Supreme Courts. https://t.co/f4eXSFm5kw
— Charles Kuck (@ckuck) April 21, 2020
Los afectados con esta medida serian ejecutivos de alto nivel, profesionales que llegaron por acuerdos comerciales con Canadá, México, Singapur, entre otros países, también personal médico y expertos en tecnología, además de solicitantes de asilo que ya han sido deportados de manera inmediata por oficiales de inmigración. Luego del anuncio del mandatario estadounidense, queda la interrogante de qué pasará con la renovación de los contratos, en caso de que la medida entre en vigencia. Según los expertos, estas comunidades de inmigrantes tendrían que salir del país.
La propuesta de Trump es cónsona con su retórica antiinmigrante, recordando su intención de construir un muro en la frontera entre Estados Unidos y México, así como sus promesas de «poner a los trabajadores estadounidenses en primer lugar». Estados Unidos, centro del sistema capitalista, atraviesa una severa crisis económica en medio de la pandemia del coronavirus que afecta a su población. Más de 22 millones de personas han solicitado ayuda por desempleo desde que el presidente estadounidense declaró una emergencia nacional el 13 de marzo.
No obstante, el mandatario no ha apartado ni un segundo sus planes financieros. En plena pandemia firmó la «ley de estímulo financiero», con la justificación de responder al brote del coronavirus, inyectó 2.2 billones de dólares a la economía estadounidense, pero siendo beneficiadas las grandes corporaciones, y por el contrario alrededor de 7.6 millones de trabajadores indocumentados no obtendrán un solo centavo, aunque hayan reportado sus impuestos durante varios años. Precisamente 57% de ellos vive en estados muy afectados y abandonados por la pandemia: Nueva York, California, Texas, Florida, Illinois y Nueva Jersey.