Como es tradición, cada Domingo de Resurrección los venezolanos ejecutan la quema de Judas. Una práctica para conjurar la traición, en esta oportunidad, los sectores populares de Caracas quemaron a la corrupción.
Usualmente, las comunidades escogen a un personaje determinado. Esta vez, se trata de la iniciativa del poder popular, ante la lucha contra la corrupción por parte del Estado venezolano.
Las parroquias San Agustín, Santa Rosalía, y La Vega estuvieron entre las que destacaron durante la jornada, muñecos bien vestidos, ataviados de maletines e incluso bolsas con dólares para recrear al personaje.
No faltó el jolgorio, el sancocho y la música para acompañar la histórica tradición. Una de las más arraigadas y promovidas costumbres de nuestra Semana Santa.
En la calle Los Cármenes de El Cementerio, Jorge Juan Loayza, se encargó una vez más de hacer todos los preparativos. Lidera esta manifestación desde 1976, cuando lo heredó de sus padres.
Reseñó que preparan al muñeco desde el Jueves Santo. La base es una estructura de hierro a la cual van adheridos los fuegos artificiales y para luego vestirlo. Todo esto se hace en presencia del público, en especial de los niños, por lo que la actividad se convierte en una especie de taller; la actividad permite que los más pequeños aprendan, no sólo con la tradición sino con el uso correcto de los fuegos artificiales.
Junto a la comunidad de la Calle "Los Carmenes", parroquia Santa Rosalía realizamos "La Quema de Judas del Cementerio", con el propósito de quemar la corrupción como antivalor para la sociedad y como elemento cultura de esta simbólica tradición. @NicolasMaduro pic.twitter.com/75vPn0tFIR
— Nahum Fernandez (@Nahumjfernandez) April 9, 2023
Loayza dijo que se había seleccionado el tema de la corrupción para llamar al Judas de este año, “porque es un mal que está atacando no sólo a Venezuela, sino a varios países del mundo».
Esta tradición en la parroquia tiene 82 años. En 2022 fue reconocida como Patrimonio Cultural de Caracas; se espera que pronto sea distinguida como Patrimonio Cultural de Venezuela.