Las fuerzas israelíes perpetraron un ataque contra un edificio residencial cerca de la Franja de Gaza, el cual dejó 3 periodistas palestinos muertos.
El bombardeo israelí lo perpetraron la madrugada de este martes cerca del puerto pesquero de la ciudad de Gaza.
Los 3 periodistas fallecieron mientras cubrían la evacuación de un edificio residencial cerca del puerto pesquero de la ciudad de Gaza.
El director de la oficina de medios del gobierno en Gaza, Salameh Maarouf, informó que los periodistas fueron identificados como Said al Taweel (director de la agencia de prensa Al-Khamisa), Mohammed Sobboh (fotógrafo) y Hisham Nawajhah (corresponsal de una agencia de prensa local.
Maaroufl condenó el «comportamiento criminal de Israel hacia los periodistas», dado que desde este sábado que inició la escalada de los ataques ya van 7 periodistas palestinos fallecidos en combates.
Three fellow journalists ascended to martyrdom in the IOF's senseless bombardment of Hajji Tower, a media center in #Gaza City. They are Saeed Al-Taweel, Hisham Al-Nawajiha, and Rizq Soboh.
Behind the scenes, journalists such as these three enable us to deliver to you the pic.twitter.com/37twn0NbBA
— 🇵🇸Iqra🟡 (@IqraBooklover) October 10, 2023
De acuerdo a la versión de un corresponsal israelí, las víctimas estaban a varios metros del edificio residencial, cuando recibieron una llamada telefónica del Ejército israelí pidiéndole que evacuara el lugar ante la previsión de un ataque inminente.
Testigos del lugar detallaron que el ataque de las fuerzas israelíes alcanzó otro edificio, más cercano al lugar donde estaban los periodistas.
El Comité para la Protección de los Periodistas informó que el sábado murieron 3 periodistas y el domingo falleció el comunicador Asad Shamlakh. Además, reportaron que dos camarógrafos están desaparecidos y otros 10 profesionales resultaron heridos.
La muerte de estos 7 periodistas rememora el asesinato de la reportera palestina Shireen Abu Akleh, quien en 2022 cubría una redada del Ejército israelí en Yenín. En ese momento, la periodista tenía un chaleco antibalas con la insignia «Prensa”, pero la bala alcanzó su cuello y la mató al instante.
Israel realizó una pesquisa interna y admitió que existe una «alta probabilidad» de que sus fuerzas mataran «por error» a la periodista, pero rechazó abrir una investigación criminal.