El huracán Fiona pasó a categoría 3 luego de sostener vientos de 185 kilómetros por hora, lo que provocó algunos muertos y grandes daños en Puerto Rico y República Dominicana.
En su paso por República Dominicana dejó destrozos similares a los perpetrados en Puerto Rico, entre ellos, una persona muertos; derribo de árboles y miles sin suministro de energía eléctrica.
Fiona se convierte en el primer huracán en llegar a República Dominicana en 18 años y a su paso declararon alerta roja en 7 de sus provincias.
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) presentó un informe la noche de este lunes sobre el paso del huracán; en el cual indicó que 7 provincias se mantienen alerta roja, 13 en amarillo y 12 en verde por posibles inundaciones repentinas.
Asimismo, detallaron que unas .497 viviendas se vieron afectadas, 1.047 personas se encuentran en albergues y 12.485 han sido desplazadas a áreas seguras.
Por los cortes de electricidad, unas 709.272 personas están afectadas, aunque el Gobierno no detalla cuántas han recuperado.
También me llegó este audiovisual de las inundaciones ocasionadas por #Fiona en Higüey. #FionaRD pic.twitter.com/pwQ1mpO8nw
— Susana Flete (@SusanaFlete) September 19, 2022
El presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, declaró zona de desastre en 3 provincias de la isla; y asegura que los daños tras el paso de Fiona son cuantiosos.
Actualmente, el huracán se dirige hacia islas Turcas y Caicos, con vientos máximos sostenidos de 185 kilómetros por hora y con un movimiento hacia el norte-noroeste a 17 kilómetros por hora.
Según el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos (EE.UU.), Fiona se convirtió en el primer gran huracán de la temporada 2022 en el Atlántico y amenaza con incrementar su potencia.
“En la trayectoria pronosticada, el centro de Fiona pasará cerca de Gran Turca; y el resto del este de Turcas y Caicos durante las próximas horas”, precisó el centro estadounidense.
Hasta los momentos, Fiona ha dejado cinco personas muertas a su paso por el mar Caribe, de las cuales 4 son en Puerto Rico y 1 en República Dominicana.
El gobernador puertorriqueño Pedro Pierluisi, informó que los daños a la infraestructura, a los cascos urbanos y las residencias han sido catastróficos.