Se repite la historia. Miles de personas integran la caravana de migrantes en su mayoría hondureños se dirigen en masa hacia Norteamérica, en una desesperada huida por la crisis provocada por las políticas neoliberales en medio de la pandemia del covid-19.
Es por ello que varias autoridades de los países de origen han exigido respeto a la integridad de sus connacionales.
Asimismo, los gobernantes regionales y nacionales han argumentado no tener las condiciones para recibir a la ola de migrantes que en estampida buscan refugios.
Al igual que en 2020 el destino final que panean todos son los Estados Unidos, pero para ello deben sortear las fronteras de Guatemala y México.
Ya en 2020 se dio esta misma caravana que no ha mermado durante los últimos meses, solo que ahora tiene un punto clímax por la segunda ola de contagios de casos de coronavirus en la región.
El año pasado el presidente estadounidense saliente, Donald Trump, amenazó con cortar relaciones y sancionar a los países que dejaran avanzar a la caravana.
Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Honduras emitió un comunicado para condenar la represión contra sus conciudadanos en Guatemala.
Además la caravana se incrementó porque piensan que Joe Biden tendrá una política migratoria más humana.
Asimismo, miles buscan huir de la crisis que se vive en la nación en medio de la corrupción y la inestabilidad que ha provocado Juan Orlando Hernández.
El mayor número de hondureños y salvadoreños aún permanece en el Km177, Vado Hondo, Chiquimula, #Guatemala. Está mañana las fuerzas de seguridad instalaron un 2do cordón en el Km137 en Zacapa, a donde logró avanzar un grupo de hondureños que logró esquivar el 1er cerco. pic.twitter.com/X6P0GSBJ0I
— Santiago Botón ?? (@SantiagoteleSUR) January 18, 2021
Diálogo fraterno
Por su parte, el Gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador explicó que buscarán un diálogo cercano y consciente.
“Estamos haciendo propuestas de que se busque diálogo con los migrantes. Esto en Honduras, en Guatemala, que se les atienda para que no entren a ningún país por la fuerza, que se les atienda y que se les respeten sus derechos humano”, dijo en su habitual conferencia de prensa.
López Obrador recordó que hace unos años conversó con el presidente estadounidense electo y quien asume la Casa Blanca desde el 20 de enero.
En ese conclave acordaron que se diera un viraje a la política migratoria de Estados Unidos que se radicalizado en la xenofobia y maltrato.
“Espero que se cumpla con ese ofrecimiento, con ese compromiso, eso lo espero, y lo voy a reconocer y celebrar. Si esto es así, tiene que acompañarse de algo que también le plantee en su momento, que es el apoyo a Centroamérica y a México, cooperación para el desarrollo y evitar que la gente en Centroamérica se vea obligada a emigrar“, explicó.
Del mismo modo, explicó que ya conversó vía telefónica con Joe Biden y le informó sobre la gravedad de la ola de migrantes que avanza.
