Oficiales de la Guardia Costera de Trinidad y Tobago mataron a un niño venezolano de 1 año, tras impactarlo con una bala luego de abrir fuego contra una embarcación de migrantes, en la que iba el menor junto a su madre.
El hecho ocurrió la noche del sábado, cuando un grupo de venezolanos salió desde Tucupita (Delta Amacuro) en una embarcación con destino a Trinidad y Tobago.
Sin embargo, durante el trayecto los interceptó la Guardia Costera de ese país y les comenzó a disparar; y una de las balas impactó al menor lo que provocó su muerte.
Al niño lo identificaron como Yaelvis Santoyo Sarabia y viajaba en los brazos de su madre, Darielvis Sarabia, quien recibió un impacto entre los senos y la clavícula, pero su estado de salud es estable.
La madre del menor está internada en el Sangre Grande Hospital en Trinidad y Tobago; mientras esperar los resultados de unos estudios para determinar si la bala le hizo daños mayores.
Familiares del niño asesinado me dicen que sus padres están conmocionados y buscan a otra niña que también iba en la embarcación. Estaría retenida, presumen.
En el viaje iban también otros niños y adultos, sobre los cuales no se tiene información hasta ahora.
— Orlando Moreno (@orlandomorenove) February 6, 2022
Un activista venezolano, Orlando Moreno, informó que notificaron la situación a las oficinas de Michelle Bachelet en Venezuela y a la Misión de determinación de los hechos de las Naciones Unidas.
En la embarcación iban unas 20 personas, entre ellos varios niños y adolescentes, de los cuales varios están heridos; y los otros presumen que están detenidos en el helipuerto militar de Chaguaramas.
¿Qué dijo la Guardia Costera?
Las autoridades costeras del archipiélago caribeño emitieron un comunicado en el aseguraron haber “disparado a los motores” de la embarcación; sin embargo, no asumieron la responsabilidad por la muerte del niño.
Asimismo, alegaron que la embarcación de migrantes venezolanos embistió contra el barco de patrullaje en varias oportunidades; y como los oficiales “temían por sus vidas” dispararon contra los motores “en defensa propia” para que se detuvieran.
«Recién ahí se descubrió que había migrantes ilegales a bordo que habían permanecido escondidos y, por lo tanto, no habían sido vistos antes», agregaron.
Por su parte, el primer ministro de Trinidad y Tobago Keih Rowley llamó a la vicepresidenta Ejecutiva Delcy Rodríguez, para manifestar su pesar por el asesinato del niño venezolano a manos de la Guardia Costera.
“Nuestro más sentido pésame a la familia y a la comunidad venezolana en general en este momento de dolor por la pérdida de la vida del niño pequeño, en el mar, durante las operaciones de seguridad que involucraron a la Guardia Costera TT y a los traficantes que transportaban personas ilícitas”, dijo.
Rowley aseguró que adelantará los trámites para recibir al nuevo embajador Edmund Dillon; en aras de concretar reuniones entre los cuerpos de seguridad de ambos Estados para combatir contra el tráfico de personas, armas y droga.
