Brasil desplazó este jueves a Italia como el tercer país con más muertes por covid-19 y se mantiene como el segundo más infectado, a 100 días desde que se registró el primer infectado.
Brasil reportó unos 1.473 fallecidos por este virus en las últimas 24 horas, lo que implica un fallecido cada minuto. Las autoridades sanitarias alertaron que la cifra podría aumentar debido a que hay 4.156 casos sospechosos.
Actualmente Brasil registra más de 645.000 contagiados y más de 35.000 fallecidos.
Movimientos sociales indican que la cifra podría ser más alta como consecuencia de la falta de médicos en los sectores más pobres que no cuentan con suficientes camas y respiradores artificiales para ser atendidos.
El Comité Nacional por la Vida y la Memoria Indígena contabilizó unos 83 pueblos afectados, 2.178 contagiados y 211 fallecidos a causa del nuevo coronavirus. Los pueblos originarios son los que se se han visto más desfavorecidos luego de la expulsión de los médicos cubanos y la falta de hospitales cercanos a estas comunidades.
Una encuesta publicada el pasado 20 de mayo reveló que al menos el 58% desaprueba la gestión de gobierno durante la crisis de la pandemia y solo 21% la califica óptima.
Movimientos sociales responsabilizan al presidente, Jair Bolsonaro, por minimizar los riesgos del coronavirus y no aplicar las medidas de prevención y propagación recomendadas por la Organización Mundial de la Salud.
El expresidente Lula Da Silva durante una entrevista declaró que el mandatario brasilero debería ser sometido a un juicio político por su mal manejo durante la pandemia.
“Ni el Presidente ni el ministerio de salud, inicialmente, vieron el coronavirus como algo grave (…) Brasil podría haberse confinado antes, Brasil podría haber preparado máscaras antes, Brasil podría haber aprobado leyes de antemano”.
