Los principales sindicatos de Francia iniciaron una nueva jornada de protestas en rechazo a la reforma de pensiones impulsada por el presidente Emmanuel Macron, el cual afecta tanto a empleados públicos como privados.
El proyecto de ley que será presentado este viernes ante el Consejo de Ministros, para que sea examinada, estará marcado por el inicio de una huelga general en el que se espera que participen varios sectores.
La respuesta de algunos dirigentes sindicales fue inmediata. Philippe Martínez, secretario general de la Confederación General del Tranajo (CGT), dijo «Todo el mundo trabajará más tiempo: es inaceptable. El Gobierno se ríe de todo el mundo».
Según presenta el portal La Izquierda Diario, el proyecto es vital para los empresarios y los partidos del régimen político francés. Se trata de quebrar lo que queda del viejo Estado benefactor, que ha venido siendo desmantelado por los sucesivos gobiernos durante los últimos 40 años. Sin embargo la reforma de las pensiones siempre fue una piedra en el zapato para los que intentaron llevarla adelante. En 1995, al primer ministro Alain Juppé le costó varias semanas de huelga indefinida que terminaron con la reforma, y con su Gobierno. Tampoco lo pudo pasar el derechista Nicolás Sarkozy en los 2000.
Esta nueva jornada de movilizaciones contra las políticas de Macron, denominada intersindical, en la que se espera que participen unos 5,5 millones de personas, con el objetivo de obligar al presidente a derogar el proyecto.
Para este jueves, se espera que se realice en todas las ciudades el desfile “Retiro de las antorchas”, que contará con la participación de los sindicatos CFE-CGC, CFTC, CGT, FA, FO, FSU, Solidaires y UNL.
Como medida de presión, en Francia llevan 37 días de paro del transporte público, decenas e manifestaciones, cuatro huelgas generales y aún así el Gobierno no ha modificado el proyecto de ley.
En este mismo contexto, trabajadores del servicio eléctrico de Francia, cortaron el servicio eléctrico a empresarios mayoristas de París a modo de protesta contra el proyecto de reforma de pensiones de Macron.