Un hombre de New Haven (Connecticut, EE.UU.), identificado como Louis Angel Ortiz, de 42 años, ingresó ilegalmente a un restaurante cerrado para prevenir la propagación de coronavirus, y se pasó cuatro días consumiendo alimentos y alcohol, informó el Departamento de la Policía local. En el lugar lo encontró este martes el gerente del negocio de comidas durante una revisión, y el intruso fue posteriormente detenido.
Al revisar las imágenes de las cámaras de vigilancia, la Policía concluyó que el hombre entró al restaurante por una ventana el sábado pasado, y durante los siguientes días se sirvió «comida, bebidas blancas y cerveza».
Ortiz también se llevó algunas bebidas del restaurante. El gerente estima que el valor de los productos perdidos puede ser de varios miles de dólares, y reportó la falta de unas 70 botellas de licor que fueron robadas o consumidas.
El hombre huyó tras ser encontrado por el gerente, pero luego fue detenido por agentes de la Policía «en posesión de una botella de ron del restaurante». Está acusado de robo, latrocino y delito contra la propiedad.
Publicado RT/RRV