Venezuela reclama su soberanía y ha comenzado 2021 aplicando diversos mecanismos legales, sociales, políticos, diplomáticos para defenderse de una conspiración internacional que pretende arrebatarle el Esequibo, territorio que es venezolano desde los tiempos de la Capitanía General y que los mapas y documentos del siglo XVIII así lo detallan. Aunque todavía es incierto lo que pasará, todo es indicativo de que se tomará una decisión viciada de nulidad.
Es por ello que activó el Consejo de Estado, Consejo de Defensa, la nueva Asamblea Nacional creó una Comisión Especial y se lanzó una consulta nacional, todo ello para unir esfuerzos para defender su soberanía.
Además, ha sido consecuente en su rechazo a las artimañas que han confabulado a varias factores de poder.
Al mismo tiempo, se apega a la única instancia que puede resolver pacíficamente este laudo: Acuerdo de Ginebra de 1966.
Desde el primero de febrero de 2018 cuando la ONU recomendó a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) tomar parte, Venezuela se opuso.
Sin embargo, la CIJ ha persistido incumpliendo con el derecho internacional que determina que si una de las partes no la reconoce, no puede tener jurisdicción.
Haciendo caso omiso a las alertas y defensa de Venezuela, avanzó en dos citaciones rechazadas por el país y asumió parte.
#EnVideo?| Dip. @HermannEscarraM: Venezuela no está dispuesta a perder ni un solo milímetro más de su territorio y todo nuestro esfuerzo está dirigido a que el territorio Esequibo sea respetado, este es un tema patriótico y de unidad nacional#FlexibilizaciónConsciente pic.twitter.com/CsV8mBU4R4
— VTV CANAL 8 (@VTVcanal8) January 25, 2021
Intereses comerciales
La CIJ se ha mostrado con exceso de celeridad en el caso del Esequibo, tanto así que ha omitido muchos protocolos.
Entre ellos la exigencia de Venezuela de que le permita el legítimo derecho a la defensa y la reprogramación de las reuniones.
Además, la rapidez con la que la CIJ ha llevado el caso ha generado una enorme suspicacias porque esta disputa suma siglos.
Pero todo se puede explicar mejor cuando detrás de la demanda de Guyana están las transnacionales ExxonMobil y Crystallex, además cuentan con el apoyo de Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, países que tienen gobiernos que han atacado históricamente a la Revolución Bolivariana.
Se ha comprobado que en los más de 150 mil kilómetros cuadrados del Esequibo hay enormes riquezas minerales, hidrográficas, energéticas y turísticas.
Del mismo modo, ya Guyana ha hecho contratos para explotar muchos rubros con varias trasnacionales.
Venezuela reitera a Guyana que no permitirá incursiones ilegales en su territorio y ejercerá la defensa de su soberanía (+COMUNICADO)#FlexibilizaciónConsciente https://t.co/7srntyxPcb pic.twitter.com/bhMdHSgpF9
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¿Qué pasará?
El 18 de diciembre se sentó un precedente ilegal porque la CIJ se declaró con jurisdicción sobre el laudo de París de 1899.
Este último recurso legal está caduco y tiene parcialidad de origen, por eso Venezuela solo reconoce al Acuerdo de Ginebra, refrendado por ambas partes.
Ahora la CIJ citó por videoconferencia para el 25 y la aplazó para el 26 de enero, invitación rechazada por Venezuela porque no reconoce lo que pasará.
Además el Gobierno Bolivariano solicitó que se hiciera en abril y de forma presencial porque es de mucha relevancia.
Asimismo, argumentó que necesita tiempo para preparar la defensa con toda la documentación, proponiendo que se haga en abril.
La decisión que tome estará viciada de nulidad porque Venezuela no reconoce su jurisdicción pero además porque han comprobado su parcialidad al recurrir a un laudo que no tiene vigencia.
Venezuela ha dicho que no permitirá que se amenace su soberanía y que defenderá su territorio a toda costa.