Más allá de haberse convertido en uno de los protagonista de la gesta independentista de Venezuela, Ezequiel Zamora, será recordado por siempre por haber ondeado las banderas de la inclusión y el respeto a la soberanía, al reconocimiento al trabajo del campo y aquella Batalla de Santa Inés, sigue levantando polvo. El grito zamorano “Oligarcas temblad ¡Viva La Libertad!”, retumba todavía.
En Cúa, hoy estado Miranda, un 1ero de febrero de 1817 nacía Ezequiel Zamora Correa, conductor de tropas, militar, político y por sobre todas las cosas, buen venezolano. Representa la unión entre el pueblo y el pueblo en armas, cuando dijo: “No habrá diferencia entre pueblo y soldados; así como cada ciudadano será un soldado para defender sus derechos, cada soldado será un ciudadano en ejercicio de la soberanía”, la fuerza cívico militar que se rescató cuando el Comandante Hugo Chávez, reveló que las ambiciones imperiales no han cesado desde esa época y que al igual que entonces, pueden ser derrotadas por el pueblo patriota.
Ezequiel Zamora era defensor de las ideas del mutualismo y promovió una reforma del sistema agrario a favor de los campesinos, que hasta entonces estaban sometidos por unos cuantos caudillos propietarios de las tierras. Por ello, el espíritu revolucionario se plasma en sus palabras: “¡Tierra y hombres libres!”.
“Somos la conciencia igualitaria y niveladora del pueblo venezolano alzado contra los últimos privilegios oligárquicos y dispuesto a cumplir del modo radical aquellas consignas sociales que se pretirieron y retardaron desde la independencia”. El pensamiento zamorano se mantiene vigente porque el enemigo es el mismo.
Una vez más se confabulan las avaricias de algunos gobiernos de la región, apadrinados por el imperio mayor que el mismo padre Libertador ya había advertido que parecían “destinados por la providencia a plagar la América de miserias en nombre de la libertad”, esos mismos pretenden atropellar las soberanías y desconocer la voluntad democrática de los pueblos.
Es tiempo de recordar frases de este insigne venezolano, que dio la vida por su nación y que enseñó con su ejemplo a las generaciones futuras que se debe “Hablar siempre con el pueblo, escuchar siempre al pueblo” para conocer de cerca sus vicisitudes y necesidades. También se puede rescatar el recuerdo de la gallardía ante las adversidades: “Si emprendemos la retirada por esa montaña, pereceremos todos miserablemente. Si damos aquí una batalla, moriremos tal vez, pero con gloria”. Mantuvo su ímpetu democrático cuando dijo “¡Elección Popular, horror a la oligarquía!” y la igualdad como estandarte “Luchamos para proporcionar una situación feliz a los pobres… Los pobres nada tienen que temer, no tienen nada que perder, que tiemblen los oligarcas, no habrá ricos ni pobres, la tierra es libre, es de todos”.
A 203 años de su natalicio, Venezuela continúa marchando en recia multitud contra el godo malandrín, siguiendo el ejemplo del General Zamora en Santa Inés, defendiendo al país en la batalla económica y electoral próxima, aspirando a un horizonte de justicia social, de lucha y conciencia de clases.
Celebramos 203 años del natalicio del hombre que rescató el proyecto libertario bolivariano que fue traicionado por la oligarquía. Ezequiel Zamora, General del Pueblo Soberano, gran Líder que representa con su arrojo y valentía la unión Cívico-Militar de la Patria. pic.twitter.com/QIpbJmR14w
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) February 1, 2020
