Las estadísticas de casos covid-19 en Estados Unidos hace meses han mostrado mayor cantidad de contagios entre las comunidades de negros y latinos.
The New York Times divulga nuevos datos obtenidos tras una demanda del medio invocando la Ley de Libertad de Información; para obligar al Centro para el control y la prevención de enfermedades de Estados Unidos a hacer pública la información.
En la publicación titulada “The fullest look yet at the racial inequity of coronavirus” (La mirada más completa hasta ahora a la desigualdad social del coronavirus); el famoso diario estadounidense comparte los nuevos datos federales sobre el virus.
Al respecto, las estadísticas revelan una imagen más clara y completa: las personas negras y latinas se han visto desproporcionadamente afectadas por el coronavirus de una manera generalizada que abarca todo el país; a través de cientos de condados en áreas urbanas, suburbanas y rurales, y en todos los grupos de edad.
Ver más allá de números y prejuicios
Según la información ahora disponible, los residentes latinos y afroamericanos de los Estados Unidos tienen tres veces más probabilidades de infectarse que sus vecinos blancos.
Además las personas negras y latinas tienen casi el doble de probabilidades de morir por el virus que las personas blancas, según muestran los datos.
Esta realidad ya ha sido denunciada incluso por el personal de salud de los centros médicos, imposible no relacionar con la enfermera que se hizo viral por admitirlo entre llantos y quejas.
Asimismo, Las disparidades persisten a través de las fronteras estatales y regionales.
Los latinos también han sido infectadas a un ritmo discordante en comparación con las personas blancas.
Uno de los puntos calientes más alarmantes es también uno de los más ricos: el condado de Fairfax, a las afueras de Washington, D.C.
No solo es más contagios, también mayor número de muertes
Es importante apuntar, que las diferencias son aún más marcadas cuando se trata de muertes. De las personas latinas que murieron, más de una cuarta parte eran menores de 60 años. En contraste, entre las personas blancas que murieron, solo el 6% eran tan jóvenes.
Hasta la fecha, la agencia ha publicado casi 1,5 millones de registros de casos. Indica el artículo que The Times solicitó información sobre la raza, el origen étnico y el condado de residencia de cada persona que dio positivo, pero esa información faltaba en cientos de miles de casos.
¿Pero es el virus quién discrimina o el sistema?
La mayor tasa de muertes por el virus entre las personas negras y latinas se ha explicado, en parte, por una mayor prevalencia de problemas de salud subyacentes, como la diabetes y la obesidad.
Se ha intentado presentar a los negros y latinos como una población que elige comer mal, sin hacer mención a las realidades económicas con sueldos bajos y muchas veces en condiciones de trabajo ilegales y nefastas.
Sobre esto, la Dra. Mary Bassett, Directora del Centro FXB para la Salud y los Derechos Humanos de la Universidad de Harvard afirma; “El enfoque en las comorbilidades me enfurece, porque realmente se trata de quién todavía tiene que abandonar su hogar para trabajar, quién tiene que abandonar un apartamento lleno de gente, tomar un transporte lleno de gente e ir a un lugar de trabajo lleno de gente; y simplemente no hemos reconocido que aquellos de nosotros que tenemos el privilegio de continuar trabajando desde nuestros hogares no enfrentamos esos riesgos “
Finalmente es importante apuntar que los latinos tienen el doble de probabilidades de residir en una vivienda abarrotada que los blancos, menos de 500 pies cuadrados por persona.
De igual manera, son los negros y los latinos quiénes tienen que hacer uso de sistemas de transporte público abarrotados, es esta misma población la que simplemente no pude parar, no pueden ausentarse, porqué en el país del sueno americano no hay días libres, con o sin covid-19.
