El Presidente Nicolás Maduro recordó los 32 años del Caracazo, una jornada que calificó como “la primera rebelión popular en el mundo contra el neoliberalismo y el fondo monetario internacional”.
Esta reflexión la hizo durante la plenaria nacional del Congreso Bicentenario de los Pueblos que se realizó en la sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño, el cual luce ahora con sus equipos repotenciados para volver a trabajar después de un año parado por la pandemia.
El mandatario recordó que aquella contesta popular que comenzó en Guarenas y duró 3 días, le costó al pueblo más de 3 mil víctimas.
“Fue una rebelión espontánea, originaria, profunda, fue un grito colectivo de ya basta” de la gente, dijo el Presidente sobre aquellos días.
Recordó que un día antes nadie pudo imaginar lo que iba a suceder al día siguiente. El Caracazo fue una reacción que tomó por sorpresa a la dirigencia progresista del país.
Adicionalmente mencionó que El Caracazo “fue una ruptura de las amarras políticas, ideológicas que el puntofijismo había establecido desde el populismo contra el pueblo”.
Una protesta general
Por ser espontánea, la protesta popular se desplegó de manera impredecible; y recordó que la respuesta del Estado para contener el disgusto de la gente, ordenaron dispararles.
“Fue un gran despertar colectivo que unió todas las luchas de 2 siglos en los genes rebeldes y auténticos y originarios de un pueblo que jamás se dio por vencido” sentenció el presidente Maduro.
32 años después de aquel evento, analizó que hay mucha de nuestra juventud apenas conoce del Caracazo por lo que han visto en los medios de comunicación o la Revolución Bolivariana.
También dimensionó el carácter nacional de aquella protesta, aun cuando la historia la llamó para siempre como “El Caracazo”. El disgusto comenzó en Guarenas, luego a la capital, y después a todo el país; por lo que consideró que muy bien aquella jornada pudiera ser llamada también como “El Venezolanazo”.
