La llegada de los buques petroleros iraníes que permitieron la reactivación del suministro de combustible en Venezuela, ha significado un logro geopolítico sumamente importante en la lucha por romper el bloqueo de EE.UU. Sin embargo, su impacto en la política interna, en la vida y el desarrollo de la sociedad venezolana, aún se encuentra en fase de consolidación. Así lo hizo saber el ministro de petróleo, Tareck El Aissami, quien confirmó la necesidad de construir una nueva cultura posrentista.
El espacio comunicacional “Maduro Guerra Live”, fue el escenario para este análisis que marca un punto de inflexión en el modelo económico venezolano, erigido sobre el derroche de la renta petrolera.
Tareck El Aissami| “Es un tema de crear una nueva cultura, una nueva conciencia, de que las cosas cuestan, es un nuevo concepto para haya responsabilidad, sobre todo responsabilidad colectiva y social sobre este derivado del petróleo. El combustible tan necesario para el desarrollo del país, de la vida. Además tomar conciencia de cuánto nos cuesta producir en un otro país asediado, en un país asfixiado. Esa rodilla asesina del imperialismo la tenemos desde hace 20 años (…) Celebramos orgullosamente junto a nuestro porque ese pueblo también soportó esa rodilla asesina, asfixiante y tampoco se rindió. Nuestra clase trabajadora ha sufrido el maltrato, el atropello de esas sanciones”.
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