Los Estados Unidos, aparentemente se han quedado solos en su empeño de acorralar a Irán con un nuevo esquema de «sanciones» ilegales. A la negativa de China y Rusia, se han sumado también potencias europeas como Inglaterra, Francia y Alemania.
De hecho, como señala Pascal Boniface, director del Instituto de Relaciones Internacionales y Estratégicas (IRIS), esta sería la primera vez que «los británicos se oponen de forma tan frontal a Estados Unidos, sobre un tema considerado esencial para la diplomacia estadounidense«, explica.
Alianza rota
El experto recuerda que ya en el año 2003 se habían presentado diferencias importantes en torno a la resolución de EE.UU. de invadir Irak. No obstante, en aquella oportunidad, el país de las potencias europeas que mayor oposición expresó fue Francia.
Las diferencias se han presentado ahora por la política guerrerista del presidente norteamericano, Donald Trump, quien de forma unilateral se salió del pacto para establecer un Acuerdo Nuclear con Irán.
Este logro diplomático que demoró años de arduas negociaciones, ha pretendido ser desestimado de un plumazo por los norteamericanos. El país del Norte emitió una orden ejecutiva ordenando que se restablezca contra Irán el esquema de sanciones previo al acuerdo.
Sin embargo, esto resulta violatorio de la normativa (resolución 2.231) del propio Consejo de Seguridad de la ONU, dado que para poder implementar medidas punitivas hay que formar parte del Acuerdo de 2015, del cual EE.UU. se retiró abrupta y unilateralmente.
Ligando que pierda
Al parecer, aunque no lo dicen abiertamente, los propios europeos están ansiosos de que Trump resulte derrotado en las elecciones presidenciales de su país, previstas para comienzos de noviembre de este año 2020. En el viejo continente se albergan esperanzas de que el candidato demócrata, Joe Biden, obtenga el triunfo. Se estima que ello pueda favorecer relaciones internacionales de mayor provecho.
Por su parte Rusia reitera que las intenciones de incrementar las sanciones contra Irán no tienen ningún asidero legal. En tal sentido, el ministro de relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, sostiene que los anuncios de la Casa Blanca constituyen un «capricho«.
«Hemos escuchado que EE.UU. manifestó que, a pesar de la voluntad de toda la comunidad internacional, considera que las sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU contra Irán se están restaurando a capricho de Washington. Son intentos con medios ilegales, no tienen ninguna perspectiva», concluyó Lavrov durante una rueda de prensa con el canciller iraní, Mohammed Javad Zarif.