Este miércoles el gobierno de Estados Unidos anunció que ahora sí respalda la propuesta de liberar temporalmente las patentes de las vacunas anticovid; con la firme intención de que puedan ser producidas en otros países.
Cabe recordar que para mayo del año pasado, se reunieron más de 140 líderes mundiales a exigir y “garantizar que las vacunas, diagnósticos, pruebas y tratamientos de covid-19; se suministraran de forma gratuita en todo el mundo”. Este mes de marzo al cumplirse el primer aniversario de la pandemia por la covid-19; el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus lamentó que «la gran mayoría» de las 225 millones de dosis de antídotos producidos hasta ese momento, se habían destinado a un puñado de países ricos y productores de vacunas. Esto continúa ocurriendo.
«Renunciar a las patentes temporalmente no significará que los productores se verán perjudicados; como durante la crisis del VIH o en una guerra, las empresas recibirán regalías por los productos que fabrican», reiteró Tedros Adhanom.
A través de un comunicado, Katherine Tai, representante de EE.UU ante la Organización Mundial de Comercio, (un año después) asegura que “es una crisis global; y las circunstancias extraordinarias de la pandemia de covid-19 exigen medidas extraordinarias”. Adicionalmente declara que la administración Biden “cree firmemente en la protección de los derechos de propiedad intelectual; pero para terminar la pandemia, apoya que se elimine esa protección para las vacunas”.
¿Por qué ahora?
Según la prensa internacional, países ricos como Reino Unido, Estados Unidos, Suiza y naciones europeas; habían bloqueado anteriormente las negociaciones en la OMC propuestas por India y Sudáfrica de ayudar a los países en vías de desarrollo, a producir sus propias vacunas usando la propiedad intelectual de las farmacéuticas.
El argumento que han sostenido hasta hoy, es que esas patentes son necesarias para incentivar la investigación y el desarrollo de medicamentos. En especial para EE.UU. que tiene 3 compañías como Moderna, Pfizer y Johnson & Johnson trabajando en vacunas.
En estos momentos y destacándose vertiginosamente, países como China, Rusia y Cuba son quienes están marcando la pauta en cuanto el tema de biológicos anticovid. Por lo que EE.UU. pierde su tradicional protagonismo en este particular, ya que no son ellos los que llevan la batuta de la inventiva.
Adicionalmente, ya han comenzado a aprobarse la producción de vacunas en otros países como Argentina, México; y en Venezuela están encaminando lo necesario para que el acceso a las vacunas sea para la mayoría de los países de ingresos bajos y medianos; que en otros escenarios pandémicos no tienen otra opción que «mirar y esperar» a ser tomados en cuenta por no haber liberado las patentes.