El pasado 15 de junio, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo se inmiscuyó nuevamente en los asuntos internos de Venezuela haciendo alusión a las elecciones del nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) por parte del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Tal y como lo establece la Constitución Nacional en el actual contexto político nacional frente a una Asamblea Nacional declarada en desacato.
Pompeo afirmó a través de un comunicado que: “Las elecciones libres son el camino para salir de la profunda crisis política de Venezuela. Desafortunadamente, el 12 de junio, la Corte Suprema controlada por el régimen de Maduro continuó manipulando la Constitución venezolana al nombrar ilegalmente un nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) alineado con el régimen”.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro advertía que en caso de que cierto sector de la oposición decida no participar en las elecciones parlamentarias sería por dos razones: En primer lugar por estar conscientes de su derrota en este terreno y en segundo lugar porque EE.UU. no se los permitiría.
«Si algún sector del G4 no quiere ir a elecciones es porque sabe que no nos gana, por el fracaso de liderazgo que tienen. (…) Que no es capaz de salir a la calle a jugar limpio y a que nos contemos con los votos del pueblo; y en segundo lugar porque están cumpliendo las órdenes imperialistas de Estados Unidos», manifestó el presidente Nicolás Maduro, quien a su vez destacó que la intención imperialista en Venezuela es descartar cualquier vía pacífica para solucionar los problemas.
En respuesta a las declaraciones de Pompeo, el canciller venezolano Jorge Arreaza se refirió a la hipocresía de EE.UU. que se asume rector de procesos de otras naciones. Mientras a lo interno cuentan con un sistema electoral podrido que impide la participación de toda la población.
La plutocracia podrida de EEUU restringe el voto afro y latino, pero tiene el tupé de cuestionar el nuevo Consejo Nacional Electoral venezolano para tratar de evadir la voluntad de nuestro pueblo. Preferirían un sistema electoral que avale sus golpes de Estado, como en Bolivia. https://t.co/uPyb5TcEI4
— Jorge Arreaza M (@jaarreaza) June 15, 2020