Duque: la amenaza sanitaria a Venezuela

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La pandemia mundial de Coronavirus ha reflejado lo que significa la política neoliberal en la atención de una emergencia de salud que debe ser atendida a través de sistemas de salud pública, pero que dicho modelo no ha tomado como prioridad históricamente. Tal es el caso de Colombia.

En este país, el primer caso de Coronavirus se registró el 6 de marzo y fue diagnosticado en Bogotá. Mediante un comunicado oficial, el Ministerio de Salud especificó que se trataba de una paciente de 19 años, que llegó al país procedente de Milán, Italia. A la mujer no se le hicieron pruebas de detección en el aeropuerto ya que para el 26 de febrero, el nivel de alerta por Covid-19 en el país era de riesgo bajo. Posteriormente, a partir del 2 de marzo se estableció el protocolo de detección en aeropuerto, que elevó el nivel de alerta.

Sin embargo, el decreto de cuarentena ocurre el 24 de marzo, 18 días después de haber sido detectado el primer caso. Para esta fecha, la cifra ya ascendía a 378 casos confirmados.

El ministro de salud de Colombia, Fernando Ruiz, en una entrevista concedida al medio la Voz de América el 26 de marzo, explicó:

“En Colombia vamos ya en la tercera semana y la expectativa es que en la cuarta o quinta semana se nos incremente el número de casos. Los modelos nuestros indican que tendríamos el mayor número de casos alrededor del 15 de mayo y lo que queremos es evitar que se nos presente un número grande de casos (…) El día máximo tendría 900 mil personas infectadas en un día; nosotros estimamos que la afectación podría ser de 32 millones de colombianos, teniendo una población de 50 millones”.

Las medidas tomadas hasta la fecha, parecen ser insuficientes a partir de las estadísticas que se han presentado. La curva no ha dejado de ser ascendente y no hay mitigación del coronavirus en el país. Diversos sectores han cuestionado las políticas establecidas hasta la fecha por el gobierno de Iván Duque, especialmente en atención al personal de salud.

La Federación Médica Colombiana, dio a conocer los resultados de una encuesta donde arrojó cifras alarmantes, casi el 88% de los trabajadores de salud no cuentan ni siquiera con un tapabocas para poder protegerse ante los casos de Covid-19 y se calcula que más del 92% no cuenta con los trajes de protección para el cumplimiento de las labores. Sergio Isaza, presidente de la Federación Médica Colombiana, indicó que hay insuficiencia de respiradores, de camas, y demás equipos de atención; además el gobierno mantiene deudas y reducciones salariales de los médicos, frente al exceso de trabajo. “El gobierno aprueba unas cosas y hace otras”, destacó.

Frente a esta situación, el pasado 9 de abril se realizó en Cartagena una renuncia colectiva de 22 médicos ante la imposibilidad de desarrollar oportunamente sus funciones, y el riesgo de enfermarse al brindar atención a los pacientes ante un virus tan contagioso y letal.

“Debido a que no se nos han suministrado los elementos de protección personal (EPP) tal como está definido en los lineamientos del Ministerio de Salud, habiendo realizado una solicitud formal de los mismos, presentamos ante usted la renuncia irrevocable”, expresaron los firmantes de la misiva.


Venezuela en riesgo

Por otra parte, el gobierno de Venezuela a través del vicepresidente sectorial de comunicación, cultura y turismo, Jorge Rodríguez, ha manifestado el peligro que representa cómo ha manejado el gobierno colombiano la pandemia, puesto que es el país que tiene la frontera más grande con Venezuela (más de 2 mil kilómetros): «En este momento se conforma Colombia como principal riesgo de diseminación a venezolanos por la entrada de personas provenientes de ese país», afirmó el Vicepresidente.

Rodríguez señaló que la transmisión de la enfermedad desde el vecino país ha aumentado de forma acelerada en las últimas semanas. «Ni siquiera se está haciendo un registro adecuado de los casos y eso significa un riesgo para el control estricto que estamos haciendo en Venezuela», indicó. Advirtió que la cifra oficial de más de 2 mil casos positivos hay que multiplicarla al menos por cinco.

Por tal motivo, se ha desarrollado una política especial en la zona fronteriza para recibir a la gran cantidad de venezolanos que están retornando al país, tomando las medidas preventivas necesarias para que esta situación no represente un peligro para nuevos brotes de coronavirus en el territorio nacional.

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