El canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Yván Gil, denunció este miércoles, a través de material fotográfico difundido en su canal de Telegram, el acto vandálico ocurrido en la sede diplomática en la ciudad de Oslo, capital de Noruega, causado por elementos fascistas «que se encargaron de dejar claro a qué intereses responden».
«La responsabilidad de la inviolabilidad de las sedes diplomáticas es del Estado receptor; esperamos que las autoridades den inmediatamente con los responsables de estos atentados. El país y el mundo se dan cuenta de quiénes son estos desquiciados fascistas, capaces de arremeter contra los intereses del pueblo venezolano», precisó Gil.
Lisboa
Igualmente, el pasado sábado el canciller Gil, también denunció que la sede del Consulado General de Venezuela en Lisboa (Portugal) sufrió un ataque con «bombas incendiarias» (molotov) que generaron un incendio y angustia al personal que allí labora. Igualmente, aseguró que ninguna agresión «desquiciada» impedirá que la «revolución bolivariana» siga avanzando.
En ese sentido, el diplomático venezolano agradeció la rápida intervención de las autoridades portuguesas que evitaron mayores daños, al tiempo que auguró que las investigaciones iniciadas permitirán dar con los autores y determinar las responsabilidades.
Vigo
Al día siguiente, el domingo, la Asociación Gallego Bolivariana -Hugo Chávez (Agabo) emitió un comunicado; específicamente para condenar los actos vandálicos perpetrados por ultraderechistas contra el Consulado de Venezuela ubicado en Vigo, España. El edificio en cuestión amaneció pintado con un grafiti despectivo hacia el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, además de presentar daños en su ventana y fachada frontal.
«Esta agresión contra los servicios que atienden al pueblo venezolano en nuestro país es una muestra más de las acciones de odio y violencia de grupos de extrema derecha, liderados por quienes niegan los resultados electorales del pasado 28 de julio de 2024», reza el mensaje.
