Controversias de la ayuda humanitaria, estadounidenses repatriados con Conviasa y Luisa Ortega investigada

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¿Quién envió y quién gestionó la ayuda humanitaria?

El presidente Nicolás Maduro ha informado al país que ha mantenido comunicación con el Secretario General de la ONU, con la Organización Mundial de la Salud y con la Organización Panamericana de la Salud, hecho corroborado por los representantes de ambos entes. Estas gestiones permitió la llegada de ayuda humanitaria a Venezuela a través de las referidas organizaciones.

Autoproclamarse y robar

La derecha en voz de Guaidó, Vecchio y Pizarro, ante la ausencia de al menos una acción concreta y efectiva para combatir el coronavirus que puedan mostrar,  hacen lo que acostumbran: se autoproclaman los artífices de la llegada de la ayuda humanitaria, agradecen a la USAID y la Unión Europea, cuando ya se sabe que la asistencia fue enviada por la ONU.

Para quienes se robaron CITGO y Monómeros, que más les da robarse el mérito de haber gestionado la ayuda humanitaria, cuando incluso ya se han robado fondos destinados a ayuda humanitaria como demostró el Cucutazo.  Olvidan selectivamente agradecer a Rusia, China y Cuba, que, por cierto, también han apoyado a la Unión Europea y a Estados Unidos.


Vente (a) Venezuela … pero todavía no

En su programa radial María Corina Machado envió el siguiente mensaje a los venezolanos que están regresando al país: “La hora del reencuentro será en libertad”, es decir: “prohibido volver hasta que caiga Maduro”, “quédense en Colombia así los boten de sus lugares de residencia”, “quédense, aunque sean víctimas de la xenofobia” “quédense así no les llegue nada de los millones de dólares supuestamente destinados para atenderlos a ustedes”. Resulta irónico que el mensaje de quien dirige un partido político llamado “Vente Venezuela” sea “No te vengas a Venezuela”.


El trabalenguas de Vecchio

Carlos Vecchio, designado por el gobierno autoproclamado como “embajador de Venezuela ante EE.UU.” y otrora empleado de Exxon Mobil en la demanda de la transnacional petrolera contra el Estado venezolano, ha afirmado que el ingreso de ayuda humanitaria es la prueba de que las sanciones no bloquean la asistencia en Venezuela, sin embargo… la ayuda humanitaria se hace necesaria porque el secuestro de miles de millones de euros del Estado venezolano en el sistema financiero internacional, impide a Venezuela comprar insumos y equipos médicos, así como otros bienes necesarios para afrontar la pandemia.

El gobierno venezolano ha declarado en infinidad de oportunidades que Venezuela no necesita que le regalen nada porque tiene cómo comprar lo que requiere, solo necesita que le devuelvan lo robado y que cese el bloqueo financiero a la nación. Por tanto, este hecho no confirma que las medidas restrictivas no afectan la compra de alimentos y medicinas. Todo lo contrario, lo confirma.


La extraña “ilusión de la guerra e invasión” se desvanece… otra vez

Pompeo declaró que Maduro no podría ser candidato a la presidencia en el marco de la “oferta del gobierno norteamericano”. Abrams lo contradice y asegura que sí podría serlo y descarta la intervención militar e insiste en la negociación. Brownfield ya había advertido a la oposición venezolana que no contaran con una invasión estadounidense a Venezuela.

Congresistas colombianos recuerdan a Duque que cualquier acción militar contra otro país requiere la autorización del Congreso y no están dispuestos a avalarlo y su ministro de defensa aclaró que no apoyan ninguna intervención militar en Venezuela, negó que haya movimiento de tropas hacia la frontera y mucho menos presencia de tropas estadounidenses con el fin de invadir Venezuela.


EE.UU. invita a sus ciudadanos a sumarse al plan Vuelta a la Patria con Conviasa

Un grupo de venezolanos quedó varado en EE.UU. ante la suspensión de vuelos como medida implementada para frenar la pandemia. Ante esta situación, los representantes en EE.UU. del autoproclamado, hicieron lo acostumbrado por sus compatriotas: nada, al igual que sucedió en Colombia, Perú y cuantos países en los que tengan “representación”.

Los pasajeros, entendiendo que dirigirse a ellos es un esfuerzo inútil, se dirigieron a la cancillería del único y real gobierno de Venezuela. En respuesta, el mismo presidente Maduro expresó su voluntad de enviar un vuelo humanitario para que puedan volver al país. Para ello era necesario gestionar el levantamiento de sanciones a la estatal Conviasa, aunque sea solo por el lapso que durara el vuelo en cuestión.

Finalmente, las gestiones del gobierno bolivariano permitieron la autorización del vuelo a través de México, a la vez que se invitó a los ciudadanos estadounidenses que quisieran regresar a su país a tomar dicho vuelo hasta México, como en efecto ocurrió. Las autoridades norteamericanas dijeron a sus ciudadanos: “te animamos a que aproveches este vuelo. Los ciudadanos estadounidenses deberían regresar de inmediato a EE.UU.”, es decir, “súbanse al Plan Vuelta a la Patria de Maduro”. EE.UU. solicitó coordinar la salida de 120 ciudadanos estadounidenses, solo se presentaron 27, ¿Prefirieron quedarse en Venezuela que volver a su patria?


Luisa Ortega Díaz y Clíver Alcalá, parecidos razonables

El Nuevo Herald hizo público que Luisa Ortega Díaz es investigada por la justicia de EE.UU. por hechos de corrupción y extorsión, asociados al caso de Carlos Urbano Fermín.

Las similitudes con Cliver Alcalá Cordones resultan notorias:

  • Ambos traicionan las instituciones del Estado venezolano.
  • Ambos huyen a Colombia.
  • Ambos se sienten protegidos por los norteamericanos.
  • Ambos son acusados o investigados por la justicia estadounidense.
  • Ambos, desde Colombia, se defienden con nerviosismo a través de videos difundidos en sus redes.

El hecho supone ciertas complicaciones para los medios de derecha. Si se refieren al fiscal general de la República, Tarek William Saab, como el “fiscal del régimen” o “el fiscal de Maduro”, entonces Luisa Ortega Díaz sería la “fiscal del autoproclamado Guaidó” o “la fiscal de la Asamblea Nacional en desacato”, pero quedaría mal que la “fiscal de Guaidó” sea investigada por extorsión y corrupción en una corte norteamericana.

Desestimar las acusaciones de un tribunal norteamericano es invalidar las acusaciones contra el Presidente de la República, de la Asamblea Nacional Constituyente, del Tribunal Supremo de Justicia y demás altos funcionarios venezolanos, por lo que es imposible que lo hagan, es más probable que esperen que le pongan precio a la cabeza de la ex fiscal, para olvidar por completo que alguna vez fue su aliada y borrar todo aquello  que los conecte.

 


 

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