El Parlamento Europeo no tiene facultad para reconocer o desconocer gobiernos y no es asunto de Venezuela la posición que asuma el ente en ese sentido.
Así lo consideró el canciller venezolano Jorge Arreaza durante una entrevista concedida a la agencia internacional de noticias Sputnik.
«No nos interesa en absoluto la opinión del Parlamento Europeo, no es un ente que tenga ninguna facultad para reconocer o desconocer gobiernos”; fueron las palabras del ministro de Relaciones Exteriores de la República Bolivariana de Venezuela
Para Jorge Arreaza; el Parlamento Europeo “es un ente que está instrumentalizado por la derecha europea y si reconocen o no reconocen algo no es asunto de Venezuela».
El diplomático venezolano afirmó que la Unión Europea se ha plegado a las políticas de agresión y bloqueo del gobierno de Estados Unidos; y “le hace seguidismo” a la posición de la Casa Blanca.
«Uno aspiraría de la UE, del vínculo que tiene con América Latina; que sostuviera posiciones distintas, diferenciadas respecto a Washington», Dijo Arreaza.
Agresión permanente
El canciller Jorge Arreaza reiteró la denuncia sobre las posiciones de agresión constante que ha asumido el Parlamento Europeo contra Venezuela.
Recordó que el propio Josep Borrell, siendo aún ministro de Relaciones Exteriores de España, dijo que “ellos (la Unión Europea) habían sido convencidos por los americanos de que ‘el gobierno del presidente Maduro caería en pocos días a principios del 2019’».
Mencionó el ministro Arreaza que históricamente la península ibérica tiene mucho peso en la relación con América Latina y el Caribe por sus vínculos culturales y económicos.
Acotó que las decisiones y medidas asumidas por Europa en torno a Venezuela se ejecutan «por afinidades ideológicas; por afinidades corporativas que en nada se corresponde con la debida relación y civilizada relación entre los Estados».
Puntualizó que en medio de las agresiones el presidente Nicolás Maduro ha mantenido la representación diplomática europea al más alto nivel.
“Hay 14 embajadores más la UE con su representante permanente, y si bien desconocieron al propio presidente Maduro que fue quien les acreditó, el presidente permite que permanezcan en Venezuela para fomentar el diálogo a pesar de duras diferencias que tenemos».