En Ecuador, la bancada por Unión por la Esperanza (UNES) solicitaron a la máxima autoridad de la Asamblea Nacional, Virgilio Saquicela, iniciar el procedimiento para destituir al presidente, Guillermo Lasso.
A través de una carta, los 47 asambleístas de UNES pidieron debatir en el Parlamento la posible destitución de Lasso.
Los parlamentarios se apegan a lo dispuesto en el artículo 130 numeral 2 de la Constitución de Ecuador, para que se proceda con el artículo 51 de la Ley Orgánica de la Función Legislativa (LOFL).
Según el artículo 51, el presidente de la Asamblea Nacional tiene que convocar a sesión ordinaria o extraordinaria; con al menos 24 horas de anticipación para debatir la de del presidente.
“El Ecuador vive una situación de grave crisis política y conmoción interna provocada por el incumplimiento de las promesas de campaña; y un Gobierno alejado de las necesidades y la realidad que vive la ciudadanía”, cita carta.
Asimismo, señalan que en estos 13 meses el Gobierno no ha podido enfrentar los graves problemas que tiene Ecuador; sino que por el contrario, los ha profundizado.
Añadieron que Lasso ya incumplido con los compromisos acordados con diversos sectores del país, como arroceros, bananeros; productores lácteos y las peticiones realizadas por el movimiento indígena y campesino.
En ese sentido, critican que Lasso en vez de dar soluciones concretas a los problemas que atraviesa el país, ha respondido con propuestas sin ningún fundamento técnico, con persecución y represión.
También denunciaron que la represión del Gobierno de Lasso ha causado hasta el momento más de un centenar de heridos; entre ellos personas que han perdido sus ojos, y lo más grave más de tres fallecidos.
Actualmente, Ecuador vive un paro nacional desde el pasado 13 de junio, cuando la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y otros movimientos han exigido al Gobierno de Lasso que atienda sus reclamos.
El debate para destituir a Lasso
El mecanismo solicitado por los asambleístas se le conoce como “Muerte cruzada”, y consiste en un debate y votación para destitución del presidente.
Es necesario alcanzar los votos de las dos terceras partes, es decir de 92 asambleístas, para poder concretar la destitución, aunque el mandatario tiene derecho a defenderse.
En caso que llegue aprobarse con los 92 votos, el vicepresidente asumirá la Presidencia de la República y en un plazo máximo de 7 días después de la la resolución de destitución, el Consejo Nacional Electoral (CNE) convocará para una misma fecha a elecciones legislativas y presidenciales anticipadas.