Luego de meses amenazando a sus usuarios de que no iban a poder hacer uso pleno de las funciones si no aceptaban sus nuevas políticas de condiciones y privacidad; la empresa WhatsApp ha decidido que no limitará ni afectará a nadie que se niegue a acatar la medida.
Después que habían anunciado que a partir del 15 de mayo de este año los usuarios y usuarias se verían limitados en sus funciones si se negaba a aceptar las nuevas condiciones; los ejecutivos de esta red de mensajería recibieron innumerables quejas y echaron un poco para atrás asegurando que no eliminará la cuenta de quienes no acepten las nuevas políticas. Aunque sí aclararon que “encontrarán una funcionalidad limitada”.
Argumentos
Ahora, según explicó un representante de WhatsApp a medios locales como The Next Web; retrocedieron tras sostener algunas conversaciones con autoridades y expertos en temas de privacidad.
No obstante, todavía siguen sin especificar cuáles consejos —o advertencias— recibieron. Lo cierto es que sus medidas, fueron criticadas con fuerza por diversas redes sociales y ejercieron una presión suficiente como para arrepentirse de implementarlas. A pesar de que nada asegura que en algún momento puedan volver a amenazar a la comunidad con que limitará cuentas que no se apeguen a sus condiciones.
«Dadas las discusiones recientes con autoridades y expertos en privacidad; queremos dejar en claro que actualmente no tenemos planes para limitar la funcionalidad de WhatsApp para aquellos que aún no aceptan la actualización». Sin embargo, señalaron que el aviso seguirá apareciendo y que «Continuaremos recordando a los usuarios de vez en cuando sobre la actualización». Según declaraciones de representantes de esta plataforma.
Aquí no
El medio digital hipertextual.com reseñó al respecto que «con tantos cambios, y ante la poca claridad de su estrategia de comunicación», las autoridades de algunos países intervinieron en la situación.
Tal es el caso de India, por ejemplo, donde se considera que las nuevas políticas de WhatsApp violan sus leyes. Alemania, por su parte, fue más allá y prohibió a WhatsApp el procesamiento de datos de personas establecidas en el país.