El canciller argentino, Santiago Cafiero anunció este jueves el fin del pacto Foradori-Duncan, un documento firmado por el gobierno de Mauricio Macri. El acuerdo, entregaba concesiones a los intereses del Reino Unido respecto de la explotación de los recursos naturales en las Islas Malvinas y vuelos al continente desde el archipiélago.
«Lo hice en reunión con el secretario de Estado para las Relaciones Exteriores del Reino Unido, James Cleverly, en la Cumbre de cancilleres del G20 en Nueva Delhi, India», escribió Cafiero en Twitter.
El acuerdo suponía también «el levantamiento de todas las medidas administrativas, legislativas y judiciales que había tomado la República Argentina para proteger sus recursos naturales frente a la explotación ilegal de la pesca e hidrocarburos», explicó el canciller argentino.
Cuestión Malvinas: Argentina notificó la decisión de poner fin al “Pacto Foradori-Duncan” de 2016.
Lo hice en reunión con el Secretario de Estado para las Relaciones Exteriores del Reino Unido, James Cleverly, en la Cumbre de cancilleres del @g20org en Nueva Delhi, India. pic.twitter.com/ZQnwKgKUtI
— Santiago Cafiero (@SantiagoCafiero) March 2, 2023
Traición a la patria
Cabe destacar que, el excanciller británico Alan Duncan reveló que su par argentino, Carlos Foradori, se encontraba en estado de ebriedad cuando firmó el acuerdo. Lo que además dejó sin efecto, algunas sanciones impuestas a empresas británicas.
En esta línea, la exembajadora argentina en el Reino Unido, Alicia Castro, dijo a la prensa que lo consideraba “una traición a patria”. Además, aseguró que “es un pacto de entrega de soberanía y saqueo de los recursos naturales”; expresó que “cuando el gobierno se vaya debe ser investigado”. “Si le damos tiempo, este gobierno entrega el petróleo a los británicos”, sentenció.
Para entonces, las razones del gobierno macrista se basaron en la supuesta necesidad de la Argentina de “volver al mundo”. Según, a través de un acercamiento con la entonces primera ministra británica, Theresa May.
Adicionalmente, el pacto establecía «remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las Islas Malvinas». De esta manera, se le dio a Gran Bretaña el permiso absoluto de iniciar la explotación de comercio, pesca, navegación e hidrocarburos en zonas del Mar Argentino.