Los días de Mike Pompeo al frente del Departamento de Estado están contados a pesar de que aseguró una transición tranquila hacia un segundo mandato de Trump. Según medios locales, el presidente electo de los EE.UU. Joe Biden barajea a Antony Blinken como el sucesor de la diplomacia norteamericana una vez tome juramento del cargo el 20 de enero del próximo año.
Si bien Biden dijo que revelaría este martes a los integrantes de su gabinete, los medios de ese país se le adelantaron con el que quizás es uno de los nombramientos más esperados.
De acuerdo a los perfiles publicados en los medios que ya dan como cierta una especulación apresurada por esa vocación natural del periodismo por dar “tubazos”, Blinken es un hombre creyente “en el multilateralismo”.
Este “moderado diplomático” con ciertas inclinaciones “injerencistas” sería el regreso de la diplomacia estadounidense a los grandes foros internacionales y pactos que Trump deshizo durante su administración en proceso de vencimiento.
Hombre de Biden
Tiene 58 años y casi 20 años trabajando con Biden desde que fue jefe del Comité de Exteriores del Senado. También fue el segundo del Departamento del Estado durante los 2 últimos años del gobierno de Obama.
Se le conoce por ser un “eurófilo” que habla fluidamente el francés, y que considera al viejo continente como un aliado fundamental de Washington.
Sobre Europa dijo recientemente que son unos aliados a los “que hay que acudir como primer recurso, no como el último, a la hora de afrontar retos”.
En cuanto al enfoque respecto a China, se ha adelantado que es partidario de enfrentar a Beijing por otros medios a los planteados por Mike Pompeo.
Según el New York Times, Blinken “tratará de cambiar la dinámica en la competición de EE.UU. con China sin abandonar esa pugna, al promover iniciativas multilaterales en materia de comercio, inversiones en tecnología y DD.HH., en lugar de presionar a naciones para que elijan entre los dos países”.
¿Y Venezuela?
Sobre lo que será la estrategia de este posible Secretario de Estado de EE.UU. con respeto a Venezuela, no han sobrado las especulaciones. Medios internacionales ya han replicado que se opuso al mecanismo de forzar un cambio de régimen en nuestro país a través de un quiebre militar, mas no cuestiona la política de Washington de intervenir.
También hay que recordar que formó parte del gobierno de Obama en la etapa en que esa administración decidió declarar a Venezuela como amenaza inusual y extraordinaria en contra de la seguridad de Estados Unidos.