Las elecciones presidenciales de Bolivia, se celebran este domingo 18 de octubre, y diversas encuestas dan una ventaja considerable al candidato del Movimiento al Socialismo (MAS) boliviano, Luis Arce, quien se perfila como probable vencedor de la primera vuelta.
El represente de la organización política de Evo Morales, mantiene una diferencia a su favor de más de 9 puntos de ventaja, sobre su más cercano contendiente el periodista y dirigente político de «centro-izquierda», Carlos Mesa.
De acuerdo con una reseña de Telesur, según el más reciente sondeo de Ciesmori, Arce concentra la preferencia de 42,2% del electorado. Mientras que Mesa, quien representa la tarjeta de Comunidad Ciudadana, se ubica en segundo puesto con 33,1%. En el tercer lugar está el empresario de extrema derecha, Luis Fernando Camacho, postulado por alianza Creemos con un apoyo de 16,7%.
Las cifras de Ciesmori coinciden con otro reciente sondeo, pero esta vez del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG). Según esta medición Arce, quien fue el arquitecto del milagro económico y social durante la era de Evo Morales, aglutina 44,4% de apoyo, frente a 34% de Mesa y 15,2% de Camacho.
Votación crucial
Sea como sea, los comicios en Bolivia se presentan como un acontecimiento crucial para la geopolítica del subcontinente. Las presidenciales en un país sumido en una profunda crisis económica e institucional, tras el derrocamiento de Evo Morales, serán también un medidor. Esto para ver cuál es el respaldo real de las fuerzas de extrema derecha en la región, que amparadas con el apoyo irrestricto de EE.UU., han dado varios zarpazos.
De acuerdo con la constitución boliviana, si Arce logra sacar más de 10 puntos de ventaja a su más cercano contendiente, en la primera vuelta, automáticamente sería electo presidente. No obstante, existen serias dudas acerca de cómo se va a desenvolver el proceso. Ya que todo será organizado por el gobierno usurpador de, Jeanine Áñez, quien incluso le ha impedido a Evo Morales postularse como senador. Y violando la Ley Electoral de ese país ha llamado a no votar por el MAS.
En virtud de ello, para analistas de talla internacional como, Ignacio Ramonet, los comicios de Bolivia, aunque revisten una importancia crucial, difícilmente se desarrollen de manera transparente. El comunicólogo europeo advierte que no existen suficientes garantías. Y que muy probablemente el fraude esté cantado en la primera vuelta para impedir que Arce pueda ganar.