El alto representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, reaccionó ante críticas que le formuló el Partido Popular Europeo (PPE); tras el envío de 3 funcionarios en misión a Venezuela, esta semana.
Dado que todas las visitas de comisiones internacionales se realizan en coordinación con el gobierno constitucional del presidente Nicolás Maduro, la ultraderecha de Europa fustigó a Borrell porque consideran un “error estratégico”, la presencia de los europeos en Caracas.
Medios españoles y agencias internacionales informaron que, en una carta enviada a la cúpula del PPE; Borrell aseveró que “sólo una solución política y pacífica permitirá a los venezolanos superar estas crisis” y acotó además que la diplomacia implica diálogo.
Sin embargo, en la misma misiva el representante del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), sostiene que “la mayoría de los Estados miembros reconoce a Juan Guaidó como presidente interino y las sanciones de la UE siguen vigentes«.
Por otra parte, afirmó que la misión de la Unión Europea no cambia, de ninguna manera, su política con respecto a la República Bolivariana de Venezuela.
La carta de Josep Borrell fue dirigida al presidente del grupo del PPE, en el Parlamento Europeo, Manfred Weber; quien calificó como inaceptable y clandestina la comisión enviada a Venezuela.
Washington también presiona
Aunado al peso que el Partido Popular Europeo coloca sobre los hombros de Borrell; también los grupos hegemónicos de Estados Unidos le colocan en el ojo del huracán.
En ese sentido, el senador del Partido Republicano, Marco Rubio publicó en su portal web una carta dirigida a Borrell, firmada junto a su colega congresista del Partido Demócrata, Benjamin Cardin.
En el texto los senadores Marco Rubio y Ben Cardin pidieron a la Unión Europea que rechace las elecciones parlamentarias venezolanas, las cuales catalogan-como «fraudulentas».
Además, señalan como “profundamente preocupantes, las conversaciones recientes de la Unión Europea con el régimen de Maduro, en relación a las próximas elecciones”.
Marco Rubio y Ben Cardin controlan el Subcomité de Relaciones Exteriores para el Hemisferio Occidental, Delincuencia Transnacional, Seguridad Civil, Democracia, Derechos Humanos y Asuntos Globales de la Mujer en el Senado de EE.UU.
Con esa posición, desde Estados Unidos también tratan de influir en la misión enviada por Josep Borrell a Caracas.
El grupo está conformado por el secretario general adjunto del Servicio Europeo de Acción Exterior, Enrique Mora y el director general en funciones para las Américas, Javier Niño; quienes estarán en Venezuela hasta el lunes 28 de septiembre.
