La pandemia mundial del Coronavirus ha generado grandes consecuencias para la humanidad: ha provocado problemas como la saturación de los sistemas de salud, ha golpeado la economía mundial y ha afectado la vida cotidiana de las personas.
En lo socioeconómico, uno de los mayores problemas a los que se ha enfrentado la población mundial es el desempleo, producto de las medidas neoliberales adoptadas por la mayoría de los gobiernos, que obligan a la población a pagar la carga generada a raíz de la paralización de procesos económicos y productivos fundamentales.
Según la Organización de Naciones Unidas (ONU), 81% de la población mundial ha sido afectada por el desempleo a partir del cierre total o parcial de sus lugares de trabajo.
La pandemia del #COVID19 causa la pérdida de 5,7% de las horas de trabajo en el segundo trimestre de este año en América Latina y el Caribe, lo que equivale a 14 millones de trabajadores a tiempo completo. #NoContagiemosAlEmpleo
La nota completa aquí ? https://t.co/eGTnW9EZ9J
— OIT Américas (@OITAmericas) April 8, 2020
El pasado martes 7 de abril, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), publicó un informe en el que se advierte de los graves efectos a escala global:
“Estamos ante una destrucción masiva de empleos, y esto plantea un desafío de magnitudes sin precedentes en los mercados laborales de América Latina y el Caribe (…) Desde ahora sabemos que al mismo tiempo que se supera la emergencia sanitaria deberemos enfrentar una verdadera reconstrucción de nuestros mercados de trabajo”, destacó Vinícius Pinheiro, director regional de la OIT.
Por otra parte, advirtió que esta crisis provocará la desaparición de 6,7% de las horas de trabajo en el segundo trimestre de 2020, afectando a 195 millones de personas que trabajaban a tiempo completo. Los recortes a gran escala se registran sobre todo en la región de Asia y el Pacífico, en donde hay 125 millones de trabajadores perjudicados.
Dentro de los sectores más afectados, según la OIT, están los servicios de hospedaje y restauración, manufactura, comercio minorista y las actividades empresariales y administrativas.
La Oficina Regional de la OIT para América Latina y el Caribe informó que desde este 14 de abril hará una serie de mesas virtuales de diálogo para abordar aspectos específicos de la crisis detonada por el COVID-19 y colaborar en la búsqueda de soluciones concertadas adaptadas a las realidades de cada país.
La @OITAmericas los invita a participar en una conversación virtual sobre el desafío de reconstruir los mercados de trabajo de la región, enfrentados a una crisis sin precedentes como consecuencia del #COVID19.
Más info aquí ? https://t.co/EEvYz2KdFR#NoContagiemosAlEmpleo pic.twitter.com/CNZST6XH4a
— OIT Américas (@OITAmericas) April 9, 2020
Venezuela protege a la población contra el desempleo
El pasado 22 de marzo, el presidente Nicolás Maduro emitió varios decretos con un conjunto de medidas económicas para proteger a la clase trabajadora frente a la contingencia del Coronavirus.
Estas medidas incluyen:
- Ratificar la inamovilidad laboral hasta el 31 de diciembre.
- Plan especial de pago de nómina a pequeña y mediana industria a través del sistema Patria durante 6 meses.
- Supresión del pago de alquileres de comercios y de vivienda principal por 6 meses.
- Plan priorizado de inversión agroalimentaria para garantizar la alimentación a 7 millones de familias.
- Bonos especiales para trabajadores informales y privados.
- Suspensión por 6 meses de pagos de capital e intereses de todos los créditos.
- Reestructuración de los términos de acceso al crédito a favor de pequeños y medianos productores.
La forma en cómo algunos gobiernos del mundo han manejado la emergencia sanitaria pone de manifiesto que el sistema capitalista está en crisis y es ineficiente, porque en un momento de urgencia como el que vivimos, las políticas que promueve este modelo, no solo son insuficientes para atender a la mayoría de la población, sino que son los trabajadores y trabajadoras quienes tienen que cargar sobre sus hombros las consecuencias de la caída de la economía, que ya venía afectada por una sucesión de crisis irresueltas. Únicamente los gobiernos con una visión distinta han generado políticas en las que prevalece el ser humano.
