Decir Chávez, es decir amor. El Comandante siempre insistió en la fuerza del amor como motor para transformar la Patria en una más justa. Hoy en día, ese amor se mantiene en el pueblo adjuntado a la lealtad más profunda.

 

Entre muchos otros valores, Chávez rescató el amor, el amor propio y hacia el compatriota que se convirtió en hermano. Se aferró en las enseñanzas de Cristo para buscar sanar la confrontación y hacer ondear en Venezuela las banderas de la soberanía, solidaridad y hermandad, hizo suyas las causas justas.

»Todo lo hemos hecho por amor». Chávez.


El pueblo, que aún llora su falta física, reitera que su mayor y más importante legado fue el amor, ese que lo convirtió en eterno e inmortal. Pese a los continuos ataques de los derechistas, de quienes lo vilipendiaron y usaron su nombre para intentar pisotear la lucha de un pueblo y la defensa de los logros conquistados desde sus inicios en la política venezolana.

»Nuestro camino no es el infierno, nuestro camino no es la guerra, nuestro camino no es el odio, es el amor nuestro camino, es la hermandad». chávez.

A través de ese amor que brindó, pese a su ausencia, aún vive en los corazones de su pueblo, pues Chávez se convirtió en vida, en vida para los niños, las madres del barrio, las y los adultos mayores que dignificó a través de las políticas públicas implementadas por amor. En los trabajadores, en los indígenas, en el campesino que, ahora en su casita tiene un afiche del Comandante para recordarlo y rememorar ese abrazo protector que sienten aún los anteriormente olvidados, desplazados e indignados. El amor de Chávez acompaña a todos y cada uno de los que creen en la vida y la unidad para construir un mundo lejos del egoísmo, la mezquindad y el sistema opresor causante de la muerte en vida.

»El amor entre nosotros, el amor por lo nuestro, el amor por el pueblo, por la revolución lo que ha hecho es crecer». Reiteró Hugo. El hijo, amigo, compañero, padre, hermano y camarada del amor de millones y, no solo de Venezuela sino del mundo entero.


El amor de Chávez significa:

John Pinto, comunicador político, manifestó que ‘‘Chávez es un amor infinito, es mi padre, sin tener una gota de su sangre, es mi sueño libertario, son mis ganas de ayudar a los que más necesitan. Chávez para mí es poesía, es alegría, es el hoy y el mañana. Chávez, mi Chávez, tu Chávez».

»Chávez es la eternidad del pueblo por su amor. El amor de Hugo se refleja en la sonrisa de los niños desplegada por todo un país que fortalece su identidad. Su amor es infinito por y para todos nosotros». Expresó Gastón Sánchez, periodista de teleSUR.

También, para las mujeres, el Comandante significó un amor sin igual. »Chávez veía los corazones de los demás, pero muchos difícilmente lograron ver y sentir el amor de su corazón que no tenía límites, era puro, era transparente», dijo Adilia Olivar.

Chávez recordaba a cada instante esa frase que dice »amor con amor se paga» y la llevaba a la realidad todos los días de su vida en este paso terrenal y aún se mantiene a casi siete años de su siembra.


Chávez y el amor familiar:

Son muchas las facetas del amor de Chávez, pero uno en particular fue el que pocos vieron: el amor a su familia de sangre.

Su sobrino Hugo Chávez Terán, expresó a este medio cómo se vivía el amor familiar del líder más importante que haya parido la Patria venezolana en el siglo XXI.

»El amor de Chávez como familiar, es un amor de compromiso, respeto y dedicación. Chávez, con su razón amorosa nos inculcó a través de sus acciones, amor por él y, amándolo a él, se aprendió a amar a la Patria», aseguró.

Chávez Terán indicó que en cada momento familiar, el Comandante trató de estar presente. »Los 31 de diciembre le dedicaba a la familia una o dos horas porque tenía que partir a cualquier actividad internacional. Entendimos como familia, que amar a Chávez, es amar a su proyecto que no es más que un proyecto de amor por la Patria».

»Chávez amándonos, nos enseñó a amar su lucha, amar su razón. Chávez, un hombre que llevó la escala de amor al pueblo a otro nivel. No ha habido un hombre que ha amado tanto al pueblo como él: un hombre amor». afirmó.


El amor por Nuestramérica

Joaquín Brand, periodista y activista argentino, expresó a Red Radio que »América Latina es una sola, ese es el amor que nos transmitió Chávez por nuestro rico y maltratado continente. Como un padre que tratando de hermanar a sus hijos, nos hizo dar cuenta que alguien en un barrio de Caracas, una favela de Río de Janeiro o una villa de Buenos Aires, tienen más en común que una élite que miró siempre a Europa»

El Comandante Chávez llevó la espada de Bolívar por América Latina, por amor, insistió una y otra vez en la unidad ante tantas arremetidas contra los pueblos de la región, acostumbrados a ser colonizados y tratados como patios traseros.

»Parecía estar dispuesto a todo para que prime la unidad frente a las amenazas externas y esa, quizás sea la mayor expresión de amor hacia Nuestramérica en mucho tiempo», añadió Brand.

Así como lo expresó el presidente ruso Vladimir Putin tras la partida física del Comandante: »Chávez amaba a su pueblo, por su carácter era una persona valiente y consecuente (…) »Chávez invertía todas sus fuerzas para sacar de la pobreza a millones de venezolanos» (…) »Chávez se convirtió en un símbolo de lucha de América Latina».


Quizá quieran decirnos que te nombramos como a un dios,
que este llanto es insensato, que nada ha cambiado,
que debemos bajar los brazos,
pero, amor ¿Quién nos engaña? Si nos vemos en el espejo y lo vemos,
mientras un hombre y una mujer se siguen tejiendo
desde nuestra piel, girando en el éter que nos calvó como una estrella.
David Gómez Rodriguez

 COMANDANTE, TÚ ERES MÁS QUE AMOR, FRENESÍ.

 

 

 

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