4F: La «derrota» necesaria

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La insurrección militar del 4 de febrero (4F) de 1992, llega a Venezuela luego de un alzamiento popular, en rechazo a las medidas antipopulares del “paquetazo neoliberal” que pretendía impulsar Carlos Andrés Pérez (CAP), quien luego de un período presidencial populista y demagogo logra ganar por segunda vez una elecciones (1988).

Esa es la historia bien conocida, pero también es cierto que los objetivos planteados por los insurgentes del 4F no fueron alcanzados, siendo ésta si se quiere, la primera gran derrota del comandante Chávez.

En 2017 la BBC afirma que el 4F Fue una derrota puntual que propició un triunfo futuro”, lo que parece una paradoja que permite hacer un ejercicio de extrapolación.

Recordemos por un momento la película “Los Vengadores – End Game” cuando el Doctor Strange utiliza, la Gema del Tiempo para ver los futuros posibles y sólo ve la victoria en un escenario de los millones posibles:

4F en tres escenarios:

  1. El triunfo de la insurrección militar: el Comandante Chávez toma Miraflores, apresan a Carlos Andrés Pérez, toman el poder político y Venezuela amanece el 4 de febrero, con un gobierno militar transitorio, que comienza a fraguar a lo interno de la política económica nacional, un conjunto de reformas económicas en beneficio de la población más humilde. Las fuerzas armadas se benefician de las medidas y continúan en un gobierno de 20 años. Los EE.UU. no reconocen el gobierno militar y comienza la conspiración internacional.
  1. La insurrección militar nunca se realizó: Las Fuerzas Armadas sin ímpetu ni determinación suficiente para alzarse en armas contra el gobierno, garantizan el desarrollo de las políticas neoliberales impuestas por Pérez. La población es quien toma la batuta y sale a las calles, con el valor para  derrocar al gobierno, sin organización ni armas, son masacrados.
  1. La insurrección fallida: Venezuela amanece con una insurrección militar que desembocó en un alzamiento en varios estados del país, entre ellos Distrito Federal, Miranda, Zulia, Aragua y Carabobo, el Comandante Hugo Chávez encabezaba las acciones.

La realidad

El gobierno de CAP logra controlar la situación en La Casona, luego de varias horas de enfrentamiento, también lo hacen en Miraflores. Hugo Chávez es derrotado en Caracas, mientras que los insurrectos logran controlar el poder en los otros estados.

Eran las 4 de la tarde, Hugo Chávez sale en los medios de comunicación y en un minuto proclamó; Compañeros: lamentablemente, por ahora, los objetivos que nos planteamos no fueron logrados en la ciudad capital; es decir, nosotros aquí en Caracas no logramos controlar el poder” (…) vendrán nuevas situaciones. El país tiene que enrumbarse definitivamente hacia un camino mejor”. Los insurrectos se rinden a nivel nacional

Las consecuencias históricas

La derrota estaba decretada hasta esta frase, lo que parecía un fin se convirtió en un final abierto, que dejaba la posibilidad de crear un desenlace distinto, uno que sin duda fue escrito a muchas manos.

Resurge Rafael Caldera, senador vitalicio quien, queriendo capitalizar el descontento popular, se alzó en la sesión del Congreso convocada por el Presidente Pérez, para condenar lo que él llamó: “intento de magnicidio”, donde las fracciones parlamentarias habían acordado, horas antes de la sesión, aprobar por unanimidad la suspensión de garantías constitucionales. Este personaje firmante del Pacto de Punto Fijo, fiel a su historial de traiciones, violó dicho acuerdo y condenó la insurrección militar, pero también condenó los acontecimientos genocidas de 1989, las políticas económicas fallidas y el detrimento de la economía nacional, llamando a una refundación institucional y política; para años más tarde con el “Chiripero” llegar al poder, traicionar nuevamente a los partidos aliados y al pueblo; y quien en un acto de cordura o miedo al inminente movimiento popular que se levantaba, da un indulto presidencial al Comandante Chávez y a los militares insurrectos.

Del “Por Ahora” al “Hasta Siempre”

Chávez se lanza a las calles y en 1998, levantando nuevas banderas de lucha, se convierte en Presidente Constitucional de Venezuela de manera democrática y pacífica. Definiendo junto al pueblo, el comienzo de una historia que algún momento pareció tener un punto y final.

La victoria solo existiría en el escenario de una insurrección fallida, solo del amargo sabor de una derrota, de un soldado caído, como el catire Acosta Carles, de un pueblo que se sabe acompañado, saldría el impulso para continuar.

Todas las realidades posibles desembocan en Hugo Chávez, todos los análisis muestran que lo sucedido ese amanecer del 4F, era definitivamente lo que tenía que pasar para que un pueblo y su líder, se fundieran en un solo cuerpo y reescribieran la historia de una patria libre y soberana.

 

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