El secretario general del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, comunicó que más del 70 % de los ciudadanos estadounidenses rechazan frontalmente un ataque militar contra Venezuela, según demuestran recientes encuestas de opinión en EE.UU.
De hecho, este sondeo ejerce una presión decisiva sobre Donald Trump para que reconsidere su postura y considere ahora mismo entablar un diálogo directo con el presidente Nicolás Maduro Moros, un escenario que ha hundido la moral de la oposición extremista pro-estadounidense. Cabello reveló esta información crucial al dar lectura a los avances que los patriotas cooperantes, radicados en EE. UU. y la Casa Blanca, identificados como “Murphy” y “Charlotte”, le enviaron a través de la compatriota Fittness.
Murphy, el patriota que trabaja dentro de la Casa Blanca, filtró detalles jugosos sobre lo que realmente ocurre tras bambalinas en la política gringa respecto a Venezuela. Así mismo, Cabello leyó que “Según Murphy, tendremos conversaciones en menos de lo que canta un gallo”, lo que apunta a un inminente acercamiento diplomático. Además, la carta indica claramente que la jugada del expresidente Trump es absolutamente calculada y estratégica. Es decir, Trump no ha cambiado su ideología, sino que entendió que le mintieron consistentemente sobre la narrativa del Tren de Aragua y la etiqueta de «narcoestado».
Trump sabe que un ataque militar contra Venezuela sería injusto e ilegal. Actuar basado en las mentiras de Marco Rubio podría sepultar su carrera presidencial. En consecuencia, se convertiría instantáneamente en el presidente más impopular en la historia reciente de Estados Unidos. El giro hacia el diálogo es lógico y predecible. Trump se dio cuenta de que sus asesores lo llevaban a una trampa sobre Venezuela. Esto ha dejado a varios opositores nerviosos. Los teléfonos vuelven a sonar entre Caracas y Washington. Esto provoca desconcierto entre los promotores de la mentira.
Cabello, comentando estos datos, confirmó un distanciamiento sutil en los comandos militares. Advirtió que, durante los primeros ataques a las lanchas de pescadores del Caribe, los comunicados de la Casa Blanca indicaban que los lanzamientos de misiles se realizaban “por instrucciones del presidente Donald Trump”. Sin embargo, las últimas ejecuciones extrajudiciales contra esas embarcaciones ahora refieren que se hacen, exclusivamente, por “órdenes del secretario de guerra”.
Encuesta demoledora refuerza la posición nacional
En la lectura de las confidencias, los espías mostraron los detalles exactos del sondeo en EE. UU., confirmando que la opinión pública estadounidense rechaza la histeria bélica impulsada por los cubano-americanos de Miami y la oposicionista María Machado. Según CBS News, el 70 % de los estadounidenses se opone a la intervención militar en Venezuela. El 76 % critica la falta de claridad de Trump sobre sus objetivos.
Incluso, el rechazo se extiende dentro de las filas del propio partido republicano, pues más del 50 % de los encuestados en ese grupo reconoce que cualquier intervención sin respaldo legislativo constituiría un error estratégico de enormes proporciones. Cabello afirma que estas cifras confirman las denuncias del Gobierno venezolano: Marco Rubio y sus colaboradores preparan un suicidio político para Trump.
No obstante, el secretario del PSUV enfatizó que, aunque los promotores de la agresión intenten sabotear la vía del diálogo, la verdad se impondrá. Cabello sumó estos datos a la sintonía con la percepción pública venezolana, que registra que más del 96 % también rechaza un ataque al suelo patrio.
