El comercio binacional entre Venezuela y Colombia ha experimentado un crecimiento notable, alcanzando un volumen de 478,6 millones de dólares en mayo de 2025. Este total representa un aumento significativo del 20% en comparación con los 399 millones de dólares registrados en el mismo período del año anterior, lo que demuestra la fortaleza y la recuperación de los lazos comerciales entre ambas naciones.
La Cámara de Integración Económica Venezolana-Colombiana (Cavecol) divulgó esta información durante su ejercicio semestral, subrayando el incremento en las importaciones. En particular, las importaciones de productos colombianos han crecido un impresionante 25,3%, alcanzando un valor total de 430,9 millones de dólares en mayo de 2025. Esto da una clara idea de la creciente demanda venezolana de productos del país vecino.
Este aumento en las importaciones evidencia el potencial estratégico de la relación comercial entre Venezuela y Colombia, especialmente en términos de nearshoring. Colombia puede suplir la demanda de productos del mercado venezolano de manera amplia y rápida, gracias a la logística y el transporte por vía terrestre, lo cual genera una ventaja competitiva considerable.
Las fronteras, puntos clave del intercambio
Adicionalmente, los datos revelan la importancia de las zonas fronterizas en este intercambio. Del total del comercio entre ambos países, 180,8 millones de dólares se registraron por las fronteras entre Táchira y el Norte de Santander. Mientras que, el intercambio entre Paraguachón y Maicao alcanzó los 159,8 millones de dólares. Estos números subrayan la relevancia de estas regiones como puntos clave para la actividad económica.
De hecho, un dato interesante que se desprende del informe de Cavecol es que el estado Táchira ha superado al estado Zulia en el movimiento de las operaciones de este comercio bilateral en lo que va del año, lo que demuestra un cambio en la dinámica de las rutas comerciales. En conclusión, los resultados del informe no solo son positivos, sino que también sugieren una revitalización en la actividad comercial entre Venezuela y Colombia, marcando un camino de mayor integración y prosperidad mutua. Sin lugar a dudas, el comercio binacional continúa consolidándose como un motor de desarrollo regional.