Con bombos y platillos presentó el gobierno de El Salvador, al “comediante e influencer” venezolano Marko Pérez, mejor conocido como “Marko Música”; para el gobierno salvadoreño su visita representa el inicio de una nueva etapa de seguridad y confianza. Sin embargo, para otros es solo un intento de “lavarle la cara” mediáticamente al presidente Nayib Bukele luego de mantener secuestrados en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) -por casi 4 meses-, a 252 venezolanos trasladados ilegalmente desde Estados Unidos.
La visita de Marko Música se produce en un contexto de fuertes críticas internacionales hacia la administración de Bukele por la violación de los derechos humanos de los detenidos. Organizaciones y defensores de los derechos humanos rechazaron su visita y, además, reiteraron que la presencia del “comediante” solo busca “lavar la imagen” del gobierno salvadoreño.
A través de las redes sociales la Secretaría de Prensa de El Salvador, anunció la llegada de Marko Música, destacando la supuesta “seguridad y confianza” resultantes de las estrategias del “dictador más cool del mundo”, como el mismo Bukele se hace llamar.
“Estas transformaciones le permiten al país presentarse como un destino atractivo y donde se pueden realizar grandes espectáculos internacionales. Como parte de esta nueva realidad, el reconocido comediante venezolano Marko Pérez se presentará en el hotel Hilton, en San Salvador”, reza el comunicado.
“Una bendición”
A su llegada, el comediante venezolano aseguró: “Lo que estoy viviendo es una bendición. Estoy viviendo un sueño de venir a un país tan maravilloso, que está viviendo un momento tan lindo. Todo el mundo habla bien de El Salvador en cualquier parte del mundo, de lo bien que está saliendo todo, del crecimiento que tiene, y yo estoy muy feliz”.
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Estas declaraciones provocaron una oleada de críticas, especialmente en relación con su aparente falta de amor por Venezuela y su silencio ante el secuestro de 252 compatriotas. Los internautas le reprochan no haber alzado su voz ante las detenciones arbitrarias de sus connacionales en el país centroamericano.
Incluso algunos internautas lo tildaron de “hipócrita, doble moral y apátrida”. Los usuarios de X le criticaron su entusiasmos por el país centroamericano, que describió como “referencia mundial” y un lugar de “prosperidad y trabajo”, por lo que le recordaron que El Salvador tiene múltiples denuncias por la violación de los derechos humanos. Además, le advirtieron que él mismo podría ir detenido por su “nacionalidad y tatuajes”.
La controversia se centra en la incongruencia entre su “amor” por El Salvador y su indiferencia hacia la difícil situación de los venezolanos en ese mismo país.
