El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, pidió al Gobierno de Estados Unidos levantar todas las sanciones a Venezuela, como parte de un plan para atender la migración ilegal.
Durante su conferencia matutina de este viernes, López Obrador presentó las propuestas que hizo a las autoridades estadounidenses, con el fin de prevenir de forma estructural la migración ilegal de personas desde Centroamérica y el Caribe.
Entre las propuestas que hizo López Obrador a Estados Unidos está el cese de todas las sanciones a Venezuela y suspender el bloqueo impuesto contra Cuba. Además, de iniciar un diálogo bilateral con ambas naciones.
«Abandonar esos temores de que el terrorismo. ¿Qué peligro puede significar para Estados Unidos Cuba o cualquier otro país y cómo se sacrifica un pueblo por intereses políticos o ideológicos?, ¿Qué, no puede haber diálogo?, ¿Qué, no puede haber entendimiento? ¿Qué, no puede haber una relación de respeto?», aseveró el presidente mexicano.
Al respecto, el mandatario mexicano hizo mención a la liberación de 26 venezolanos que fueron secuestrados en el estado de Tamaulipas, mientras intentaban llegar a territorio estadounidense.
Poco a poco más gente se concientiza, sobre todo los jóvenes; México es un pueblo muy politizado. Conferencia matutina https://t.co/Y2bES7xFqR
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) January 5, 2024
Otra de las peticiones que le hizo a la Administración de Joe Biden fue que el Congreso apruebe un plan de cooperación y desarrollo que destine 20 mil millones de dólares a los países de Latinoamérica y el Caribe.
«Claro que los del Congreso ponen el grito en el cielo, pero tiene que haber una política humana con dimensión social», subrayó.
Asimismo, solicitó la regularización de al menos 10 millones de hispanos que tienen más de 10 años trabajando en Estados Unidos.
Estos planteamientos los expuso López Obrador durante una reunión que sostuvo en diciembre pasado con el secretario de Estado, Antony Blinken; el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas y la asesora presidencial de Seguridad Nacional, Elizabeth Sherwood-Randall.