En una reciente entrevista, el fiscal general de la República, Tarek William Saab, denunció que la sustracción de dineros públicos provenientes de la venta de petróleo, tal como ocurrió entre octubre y diciembre de 2022, obedecía a un “plan político”.
“La conclusión es clara: generar una implosión de la economía venezolana para buscar un saldo político desfavorable al estado venezolano”; así declaró el Fiscal General, quien estuvo de invitado este sábado en el programa Análisis Situacional conducido por Oscar Schemel.
Durante ese programa, Saab se refirió a las 5 tramas que investiga el Ministerio Público a petición de la Policía Nacional contra la Corrupción. En ella están implicados funcionarios públicos de las estatales Pdvsa; así como también de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) y Cartones de Venezuela (Cartoven), alcaldías y trabajadores del Poder Judicial.
Por esos hechos hay 61 personas detenidos, 43 de ellos provenientes de la industria petrolera. Pero el Fiscal aclaró que la corrupción no involucra exclusivamente a organismos e instituciones públicas, porque allí están incursos particulares que, como empresarios, comerciantes “pueden alentar, instigar a un funcionario público a delinquir”. Tal circunstancia la catalogó el titular del Ministerio Público como “una componenda, un concierto de intereses totalmente negativos, putrefactos”.
Mafias
El Fiscal recalcó que el modus operandi de la mafia que se detectó el Pdvsa implicaba la ejecución de “operaciones paralelas”. Tal operación se iniciaba con la asignación de cargamentos de crudo a la Superintendencia Nacional de Criptoactivos (Sunacrip) y a particulares; incumpliendo las normativas de contratación.
“Luego que comercializaban el crudo asignado ilegalmente se incumplía con los pagos correspondientes a Pdvsa. El ingreso de esas operaciones paralelas no entraba al Estado…y con el tema de las criptomonedas los iban lavando, los iban desapareciendo para generar una crisis económica que afortunadamente fue detenida; podemos decir que la operación la truncamos. Hay un daño obviamente”, explicó.
“Por qué todo ese dinero, para dónde y para qué; obviamente obedecía a un plan político nefasto que ha sido no solamente judicializado y procesado sino ha sido develado, descubierto y sus responsables detenidos”, indicó el Fiscal General quien calificó esa trama de corrupción como “altamente explosiva”.
La conspiración
El 26 de marzo Últimas Noticias publicó un reportaje titulado La Conspiración de las Tres Patas donde se señala que la Operación Anticorrupción iniciada el pasado 17 de marzo, es la forma en que el presidente Nicolás Maduro le está saliendo al pasado “a una gran conspiración”.
Diputados cercanos al Jefe de Estado explicaron en esa ocasión que tal conspiración tenía tres patas, una de las cuales plantada en la industria petrolera desde donde se buscaba alcanzar aquello que planteaba en 2018 el ex embajador de Estados Unidos en Venezuela, William Bronfield de “acelerar el colapso de la economía venezolana”.
Una segunda pata de esa presunta conspiración estaba en el Poder Judicial, empleado para decirle al mundo que en Venezuela no hay Estado de derecho porque la justicia se transa en dólares.
El ejemplo emblemático de ello fue la liberación de un sujeto presuntamente vinculado con la organización delincuencial Tren del Llano, identificado como Oswaldo José Cheremos Carrasquel.
Este sujeto supuestamente pagó 240 mil dólares en efectivo y camionetas. Esto para obtener una medida que lo colocó en las calles entre el 9 de enero y el 15 de febrero pasado cuando fue recapturado.
Por ese hecho está detenido el entonces presidente del Circuito Judicial de Penal Caracas, Cristóbal Cornieles y el juez José Maxcimino Márquez García, quien otorgó la libertad a Cheremos Carrasquel. Igualmente, Mario Aquino, asistente de Cornieles y la abogada Loreannys Mariana Mejías Díaz, asistente del diputado Antonio Benavides Torres.
Otra pata
La tercera pata del presunto movimiento conspirativo está en la utilización de las organizaciones criminales para caotizar al país. Tal como pretendieron días previos a la Operación Gedeón, cuando la Banda del Wilexis protagonizó una serie de tiroteos en el barrio José Félix Rivas, Petare; entre finales de abril y comienzos de mayo de 2020.
La Operación Gedeón pretendía derrocar al presidente Nicolás Maduro y colocar a una junta presidida por Juan Guaidó, según las revelaciones de sus participantes.
Las fuentes consultadas señalan a la Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA) y la Central de Inteligencia Americana (CIA) como partícipes de esa “gran conspiración”. Incluso, desempolvaron el expediente según el cual Venezuela es un país permisivo con el tráfico de drogas. Para ello pretendían montar una falsa operación donde aparecían militares venezolanos transportando alijos de drogas, explicó una fuente.
El Fiscal General dijo que todos los funcionarios públicos procesados por la trama de corrupción en Pdvsa los imputarán por traición a la patria; entre otros delitos.
Con información de ÚN.