Ríos de sangre corren en las cárceles ecuatorianas. Imágenes dantescas y macabras inundaron las redes sociales, donde se observan personas siendo mutiladas y masacradas. Según hipótesis que manejan los cuerpos de seguridad, estos serían “enfrentamientos” entre bandas por el control de carteles de drogas. También se presume que el control de bandas armadas en cárceles es producto de la eliminación de ministerios y reducción de presupuesto por parte del régimen de Lenín Moreno.
#Urgente | Cuenta de Anonymous Ecuador hace público el asesinato de varios reos en las cárceles de Ecuador, atribuye responsabilidad al gobierno del país. Noticia en desarrollo. @CMonteroOficial https://t.co/rtKyyeOwml
— La Verdad informa Ec (@LaVerdadInforEc) February 23, 2021
Varias bandas estarían en “pugna” por el control de los recintos carcelarios. Al menos 79 reclusos habrían perdido la vida y unos 20 estarían heridos. Dichos enfrentamientos estallaron paralelamente en: Cuenca (sur) Latacunga (centro) y Guayaquil (costa). Las imágenes fueron compartidas por reos con teléfonos móviles dentro de las cárceles. En ellos se observa cómo se quemó, mutiló, degolló y por consiguiente se asesinó “en vivo y directo” a las personas privadas de libertad.
Respondan al país señores del @CJudicaturaEc
Si no pueden aplicar las normas constitucionales, despachar un juicio de garantías con celeridad y TUTELAR los derechos de nadie, renuncien. Punto.
¿No se dan cuenta q el país está HARTO de esto? pic.twitter.com/MFCj8ty6Ld— Pedro Granja (@PedritoExtranja) February 24, 2021
Primera hipótesis: “Enfrentamiento” entre bandas
El Director General del Servicio Nacional de Atención Integral de Personas Adultas Privadas de La Libertad y Adolescentes Infractores (SNAI), Edmundo Moncayo, dijo que todo se originó luego de la “requisa” realizada en las cárceles la noche del lunes, donde descubrieron armas, teléfonos, droga y demás. Posterior al hecho se levantaron las primeras acciones de masacre enfrentándose entre bandas.
Según el servidor público, las organizaciones delictivas vienen tomando el control de las cárceles, organizando sus “fuerzas” y creando bandas internas. Recibiendo apoyo externo de armas y teléfonos. También identificó que las bandas criminales que se “disputan el control carcelario” serían: los choneros, lobos, pipos, chonekillers, entre otros. Como consecuencia del asesinato de alias “Rasquiña”, en Manta.
Según el periodista de TCTV, Cristhian Hidalgo, “Decenas de papeles con amenazas fueron arrojados en el parqueadero de TC Televisión”. En los panfletos se lanzaría una amenaza a la población en general puesto que el cartel «Nueva Generación» dice que se “podría ocasionar muertes en las calles”.
Urgente:
Decenas de papeles con amenazas fueron arrojados en el parqueadero de @tctelevision en #Guayaquil.
El autodenominado cartel "Nueva Generación" anticipa que podría ocasionar muertes en las calles. Efectúan algunos pedidos: ? pic.twitter.com/xvHvy42TEz— Cristhian Hidalgo (@chidalgotv) February 24, 2021
Segunda hipótesis: desgobierno, falta de atención y “responsables”
El expresidente, Rafael Correa, denunció que la situación carcelaria se agudizó por la falta de inversión y eliminación de entes públicos de atención a las cárceles. “Desmantelaron TODO: Ministerio de Seguridad, Ministerio de Justicia (encargado de las cárceles), etc.” Esto se traduce en la “disminución” del Estado, como “exigencia” del Fondo Monetario Internacional (FMI).
NO, Lasso. Se dejó un sistema carcelario que era ejemplo para la región, pese al terremoto que derrumbó cárcel de Portoviejo y dañó la de Esmeraldas.
Ustedes desmantelaron TODO: Ministerio de Seguridad, Ministerio de Justicia (encargado de las cárceles), etc.#RenunciaMoreno https://t.co/QlDjqoXIuK— Rafael Correa (@MashiRafael) February 24, 2021
Las cárceles ecuatorianas son concebidas como “centros de rehabilitación”, nada más alejado a la realidad. Actualmente son centros de tortura, delincuencia organizada, epicentro de distribución de drogas y planificación de secuestros. Todo esto producto del abandono, desatención y falta de inversión por parte del régimen de Moreno, que una vez más, demuestra el fracaso de un gobierno neoliberal que puso lo “monetario” por encima de lo “humano”.
Ante esto, el presidente saliente, Lenin Moreno, denunció en Twitter, casi deslastrándose de toda responsabilidad, que “organizaciones criminales realizan acciones de violencia simultáneas en varios centros penitenciarios del país”. A pesar de haber recibido “advertencias” por parte de su propio director de SNAI, Edmundo Moncayo, quien manifestó la necesidad de “fortalecer la seguridad del sistema penitenciario del país”, pero también justificó la desatención del sistema carcelario diciendo que los recursos fueron destinados al “ministerio de salud”, producto de la pandemia.
? El asambleísta @ppsesa informó en #PuntoNoticias que las autoridades conocían de lo que iba a ocurrir en los Centros de Rehabilitación desde hace 15 días y no hicieron nada.@alexismoncayo pic.twitter.com/66Mk4un2jb
— Diana Dávila (@DianaDavilaN) February 24, 2021
Según Moncayo, la falta de inversión gubernamental en “infraestructura y agentes policiales”, dejó sin “defensa” o protección al régimen carcelario. El cual, actualmente, cuenta con más de 38 mil privados de libertad.
#EdmundoMoncayo (@SNAI_Ec): "Desde la muerte del líder delictivo en la ciudad de Manta, alias '#Rasquiña', sabíamos que habrían este tipo de acciones de parte de bandas que buscan ese liderazgo dentro del #SistemaPenitenciario".
➡️ 98.1 FM #Quito o https://t.co/Crat2zIIb2. pic.twitter.com/jfQJy3UPnc
— NotiMundo (@notimundoec) February 23, 2021
El “culpable” ¿Lenín Moreno?
Todo apunta a que ambas hipótesis son ciertas. Consecuencia de un cúmulo de situaciones que agudizaron los problemas internos en las cárceles. Amparados en la desatención gubernamental, el crecimiento de bandas armadas y carteles de droga.
Mi profunda solidaridad con familiares de víctimas de los terribles acontecimientos ocurridos en centros penitenciarios de Guayaquil, Cuenca y Latacunga. Desplegamos controles para mitigar la situación y seguimos investigando los hechos. Los autores serán sancionados.
— Lenín Moreno (@Lenin) February 24, 2021
Los servicios de inteligencia sabían de los “amotinamientos”, antes de llevarse a cabo. Esto significaría un flagrante crimen de “lesa humanidad”, puesto el Gobierno estaba consciente que los hechos y no hizo nada para prevenirlos.
La primera consecuencia a lo interno del régimen del gobierno, fue la dimisión del subdirector del SNAI, coronel Orlando Jácome.