El Secretario General del Alba-TCP, Sacha Llorenti antes de llegar a encabezar el organismo, fue el embajador de Bolivia ante la ONU.
Por causas del derrocamiento contra el presidente Evo Morales, abandonó el cargo que ocuparon los golpistas.
Durante este receso maduró varias lecciones, que no solo fueron el término de un análisis individual, sino la reflexión colectiva de un movimiento político que comprendió que cometió el error de la ingenuidad al confiar en la palabra de un rufián como Luis Almagro.
Llorenti, tomando las palabras del Che Guevara, concluyó que con la OEA “No se puede confiar ni tantico así”.
El boliviano describió al secretario general de la OEA como uno de los agentes más serviles a los EE.UU. como no ha tenido otro ese organismo regional.
“El mayor cómplice de Donald Trump ha sido Almagro, los bolivianos han aprendido esa dolorosa lección”, reconoció el diplomático.
Con una claridad meridiana, sin maquillar el análisis, precisó que el uruguayo “Actuó para beneficiar los intereses de los EE.UU.”.
El pueblo pidió a Evo
Sobre si la crisis en Bolivia la desencadenó el error político de la postulación de Evo a la reelección a pesar de haber perdido un referéndum en el que consultaba la posibilidad de hacerlo, Llorenti consideró que éste no fue el punto de partida de la crisis.
Para él, la candidatura de Evo fue una decisión colectiva de los movimientos sociales después de la consulta, un paso en el que influyó un escenario internacional: la traición de Lenin Moreno a Rafael Correa en Ecuador.
La reelección de Evo era el paso lógico para continuar la revolución política sin riesgo de desviaciones; un escenario que los factores reaccionarios decidieron interrumpir a la fuerza.
Si bien la dictadura que se instaló luego fue un paréntesis dolorosos, Llorenti considera que fue un curso avanzado y acelerado de neoliberalismo que le presentó a los jóvenes una dimensión de la política y la economía que no conocían, y la cual subestimaban.
Dos grandes líderes
A pesar de las conjeturas que buscan insinuar intriga y división entre Evo y el presidente Arce, Llorenti asegura que hay una hermandad “a prueba de todo” entre ambos líderes.
Para Sacha Llorenti, Secretario del Alba-TCP Bolivia tiene la fortuna de tener como Presidente a quien fue el mejor ministro en la historia del continente, y al líder más importante en la historia del país, el cual que transformó para siempre.
Sobre si Evo califica para un cargo internacional, destacó que sí. Incluso que pudiera ser un buen conductor de la Unasur, un organismo en escombros, pero aún no liquidado, cuya reconstrucción inmediata o no dependerá de lo que pase en las elecciones de Ecuador este 7 de febrero.
