Manaos atraviesa una crisis compleja. La pandemia de la covid-19 ha develado las contradicciones del actual sistema mundial, esto ya ha sido mencionado en muchas oportunidades y por diversos actores.
Sin embargo, la manera de manejar la crisis de cada Estado, en el marco de las relaciones internacionales; ha demostrado la concepción acerca de la salud, y por tanto de la vida, manejada por los gobiernos.
El caso de América Latina es digno de analizar puesto que ha sido una de las regiones epicentro de la misma, luego de que Europa y EE.UU. ocuparan este lugar.
Dentro de América Latina merecen especial atención Ecuador, Bolivia y por supuesto Brasil que han vivido experiencias dramáticas (con mayor fuerza en Manaos), como consecuencia de la privatización casi total de la salud en estos países.
En el caso de Brasil, además, la desidia e irresponsabilidad demostrada por Jair Bolsonaro han permitido que los niveles de afectación de esta pandemia sean realmente devastadores. Caso especial la realidad que se vive en la población de Manaos, frontera con Venezuela, en la que el sistema sanitario ha colapsado y se ha agotado el oxígeno para la atención a los pacientes. En la última semana al menos mil personas han sido enterradas como consecuencia del coronavirus, según datos confirmados por las autoridades locales.
El internacionalismo como principio
«Todo cuanto hagamos por la unidad no sólo estará justificado por la historia, sino además, se convertirá en el más luminoso legado que podamos dejarles a las nuevas generaciones. Igualmente, estaremos honrando activamente la memoria de nuestros Libertadores y Libertadoras». Hugo Chávez Frías.
La Revolución Bolivariana establece dentro de sus principios la solidaridad internacional. Colocando la vida como centro fundamental y por encima de la política internacional en la que el Estado brasileño ha sido actor principal en el intento de derrocar al gobierno de Nicolás Maduro; Venezuela ha decidido donar 136 mil litros de oxígeno (como primera entrega) a esta población.
Este gesto humanitario cobra mayor relevancia a partir del bloqueo internacional al que está sometida la Nación y a la negación que el gobierno de Jair Bolsonaro ha tenido con respecto a la posibilidad de articular políticas comunes para la atención de la pandemia en la frontera Brasil – Venezuela.
En Manaus la población salió a la calle para recibir el oxígeno enviado por Venezuela para atender la crisis del covid-19. Manaus es una ciudad que está en medio a la selva Amazónica, donde la logística para grandes cantidades de insumos es extremadamente compleja. pic.twitter.com/Tp1eVdIz4H
— FaniaRodrigues ? (@FaniaRodrigues) January 20, 2021
La Unidad de los pueblos es el Sur
El ex presidente Luis Inácio Lula Da Silva, agradeció el gesto de Venezuela. Vale destacar la política que junto con Hugo Chávez, Néstor Kirchner, Evo Morales; promovieron la unidad en el hemisferio del Sur impulsando la región como un bloque de poder en el mundo y estableciendo alianzas como la UNASUR, la ALBA, la CELAC, entre otras, desde otro modo de relacionarse con el mundo:
“Su gesto demuestra que es posible hacer política sin odio. Tenga la seguridad, señor Presidente, de que esta acción no será pasada por alto por el pueblo brasileño. Y tan pronto como conquistemos la democracia de regreso a Brasil, restableceremos relaciones políticas civilizadoras con el gobierno y el pueblo hermano de Venezuela (…) Con este gesto de solidaridad, queda la lección para que los países aprendan a vivir democráticamente en la adversidad”. Luis I.Lula Da Silva
Como expresa Lula Da Silva, es posible hacer política de una manera distinta. Esto cabe para todas las dimensiones de la vida en sociedad. Es posible hacer una política internacional distinta y crear nuevas formas de relación donde el centro sea la vida. Así se ha demostrado en las acciones que promueven países como Cuba y Venezuela en el mundo, acciones que más allá de un beneficio monetario, encierran una valoración ejemplar al ser humano y a la posibilidad de construir en colectivo.