Alicia Ernestina de la Caridad del Cobre Martínez del Hoyo nació el 21 de diciembre de 1920, en La Habana (Cuba), e inició su formación en la danza con solo nueve años de edad. Fue una de las más grandes exponentes del ballet cubano alrededor del mundo.
Comenzó sus estudios de ballet en la Sociedad Pro-Arte Musical. Luego, estuvo en la escuela American Ballet de Estados Unidos, donde se formó con profesores como Enrico Zanfretta y Alexandra Fedórova.
Se casó con Fernando Alonso a la edad de 15 años y cambió su apellido por el de Alonso, como sería conocida en el mundo de la danza durante el resto de su carrera. Fundó en 1948 el Ballet Alicia Alonso, que luego se denominó Ballet Nacional de Cuba (BNC), del cual fue directora.
La bailarina cuando estuvo en Nueva York, estudió con Anatole Vilzak y Ludmilla Shollar en la escuela del American Ballet Theater y después con Vera Vólkova en Londres, grandes exponentes de la cultura.
La mejor, a pesar de las dificultades
A los 19 años de edad, Alicia Alonso presentó un defecto en un ojo y quedó parcialmente ciega, por lo que sus compañeros debían estar siempre en el lugar exacto donde ella esperaba que estuviesen. También usaban luces sobre el escenario en diversos espacios para guiarla.
Fue la primera americana que participó en los ballets de Bolshoi y Kirov en los teatros de Moscú y Leningrado (Rusia), al igual que en los musicales Great lady (1938) y Star in your eyes (1939) en Estados Unidos.
Además, recibió el doctorado Honoris Causa por la Universidad de La Habana (capital), así como la medalla de oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid y la Orden de las Artes y las Letras en Francia, entre otros galardones.
La bailarina murió el 17 de octubre de 2019, a los 98 años de edad. Su partida física ha conmocionado al mundo.
