La sonda Chang’e-5 de China llegará próximamente con las muestras de rocas lunares y suelos recogidos, los cuales serán investigados para descubrir su origen y la evolución del satélite.
El Centro de Lanzamiento de Satélites de Qiuquan, a cargo del lugar de aterrizaje, informó que la sonda aterrizará en los pastizales cubiertos de nieve de Siziwang Banner en la Región Autónoma de Mongolia Interior.
En estos momentos, ya se realizaron todos los preparativos y el personal está listo en la espera del aterrizaje, aunque una serie de factores pueden causar dificultades al momento de la llegada.
Entre los factores están que la cápsula de reintegro es pequeña, la nieve está espesa y las temperaturas extremadamente bajas; además que el vehículo está programado para aterrizar durante la noche.
Sin embargo, los trabajadores de recuperación han realizado varios simulacros y también han mapeado minuciosamente el área de aterrizaje.
El jefe técnico del equipo de recuperación del Centro de Lanzamiento de Satélites de Qiuquan, Bian Hancheng, detalló que la cápsula de reingreso fue diseñada para adoptar un método especial de aterrizaje; porque las naves espaciales que regresan de la Luna viajan más rápido que las que vuelven a entrar desde la órbita terrestre.
¿Cómo trabajó la sonda Chang’e-5?
La Chang’e-5 fue lanzada la madrugada del 24 de noviembre y el 1 de diciembre aterrizó en la Luna; siendo así la tercera nave espacial de este siglo en aterrizas en la superficie lunar.
Una vez llegó a la Luna utilizó un taladro para obtener las muestras subterráneas; y luego con un brazo mecánico recogió las muestras del suelo, las cuales se empaquetaron en un recipiente al vacío, dentro del ascendente.
El 6 de diciembre se transfirió las muestras lunares a la cápsula china. Ese mismo día, el ascendente se separó de la combinación y el 8 de diciembre se le mandó a que alunizara; y ahora se espera que regrese a casa.