Este 15 de mayo, los titulares de los principales medios de EE.UU. han sido reservados a la economía. Caídas en las ventas hasta 20% en algunos rubros, negocios que han cerrado sus puertas, cadenas hoteleras al borde de la quiebra, e incluso con emotivos vídeos virales de ejecutivos lamentando las pérdidas económicas.
Histórica tasa de desempleos
Al respecto, conviene hacer revisión del lamentable saldo humano detrás de los encabezados: Despidos masivos. La situación generada por el covid-19 provocó la destrucción de 36.5 millones de empleos.
Estados Unidos ha registrado hasta la fecha la cifra de 1 millón 456 mil casos confirmados del virus y más de 86.500 fallecidos, de acuerdo al recuento independiente realizado por la Universidad John Hopkins, y que ha sido cuestionado esta misma semana por el experto epidemiólogo Anthony Fauci en su declaración ante el senado, “no sabemos el porcentaje, pero seguro es más alto”, afirmó.
Ante este desalentador panorama, son millones las familias que además de lidiar con el dolor natural de la pérdida de un familiar, ahora mismo se encuentran desprotegidos sin un ingreso para hacer frente a las necesidades mínimas.
La pérdida de empleo supera las cifras de la última recesión.
El informe del Departamento de Trabajo difundido este jueves, detalla la rapidez en la que se ha producido un profundo colapso del mercado laboral desde las primeras semanas de la pandemia en el país.
Seguro de desempleo
Más de 2.9 millones de personas solicitaron la semana pasada el subsidio por desempleo en EE.UU., los nuevos datos elevan a 36.5 millones los trabajos perdidos desde mediados de marzo, una cifra solo comparable a la situación que vivió el país durante la Gran Depresión de hace casi un siglo.
Según el citado informe, el número de personas que solicitó por primera vez beneficios por desempleo en la semana que terminó el 9 de mayo se redujo en unas 200 mil respecto a la semana anterior, pero fue más elevado de lo que esperaban los analistas.
Afroamericanos e hispanos los más afectados
El coronavirus no sólo ha afectado mucho más a hispanos y afroamericanos en Estados Unidos en cuanto a la cantidad de enfermos, sino también en cuanto a las repercusiones económicas, reveló un sondeo de The Associated Press y el NORC Center for Public Affairs Research.
El estudio halló que 61% de los hispanos estadounidenses han sufrido repercusiones económicas a raíz del brote. Pérdida de empleos, ausencias no pagadas, recortes salariales u horarios reducidos. Esa cifra se compara con un 46% de los estadounidenses en general. Un 37% de los hispanos y un 27% de los afroamericanos no han podido pagar por lo menos una de sus facturas como resultado de la crisis. Entre los blancos el porcentaje es de 17%.
El sondeo, realizado a mediados de abril, halló que el 21% de los hispanos no han podido pagar su hipoteca o renta y un 23% no ha podido pagar una tarjeta de crédito. Ello en comparación con 8% en ambos renglones entre la población estadounidense en general. Entre los negros, el porcentaje que no ha podido pagar uno de esos tipos de facturas es de 15%.
La tasa de desempleo de los trabajadores negros aumentó a 16,7 %, casi 3 veces su nivel en febrero, justo antes de que se detuviese la actividad comercial por el coronavirus. Se trata de la cifra más alta para este colectivo desde principios de 2010, según recogen los datos del Departamento de Trabajo.
La respuesta de Trump
La administración Trump insiste en que a medida que los estados vuelvan a abrir, más estadounidenses comprarán, cenarán y reanudarán otras actividades, estimulando así la economía. Pero los primeros datos sugieren que el temor a contraer el virus, incluso más que las órdenes de cierre, puede estar perjudicando la economía. Sin medidas de salud pública más fuertes, como pruebas generalizadas o una vacuna, los economistas dicen que ese temor deprimirá el crecimiento incluso a medida que más estados reabran sus economías.
Adam Ozimek, economista jefe de Upwork, dijo que los datos del sitio de reservas OpenTable muestran que las reservas aún están un 91% por debajo de su nivel anterior al virus.
El presidente Donald Trump pareció responder al informe tuiteando: “Están saliendo buenos números de los Estados que se están abriendo. ¡Estados Unidos está recuperando su vida!”
“Simplemente terminar con los bloqueos no será una panacea para estas compañías”, dijo Ozimek. “La gente no sale porque todavía no se siente segura”.
Sobre los riesgos de reabrir muy pronto, también se pronunció el epidemiólogo Fauci, director del instituto nacional de alergias e enfermedades infecciosas, alertando a los congresistas el peligro que sería para la vida y en consecuencia para la economía de millones de estadounidenses retomar de manera improvisada “la normalidad”.
