Tras ser declarada persona non grata, en reciprocidad ante agresiones del gobierno de la Unión Europea, la embajadora Isabel Brilhante Pedrosa abandonó Venezuela este martes 7 de febrero y se despidió en redes sociales, donde dejó notar cierta nostalgia.
«Los llevo a todos en tantos recuerdos hermosos. Mi corazón se queda aquí. Te quiero, Venezuela«, fueron palabras de la diplomática de nacionalidad portuguesa. En el mismo texto señaló que en el día de su salida del país «Caracas me regaló el amanecer más bello con el Ávila en todo su esplendor».
De igual forma, expresó «gracias infinitas a todos los venezolanos por su cariño, reconocimiento y afecto», pocas horas antes de partir; en cumplimiento a la medida que resultó de las políticas que ejerce la UE y que constituyen irrespeto al gobierno constitucional venezolano y al derecho internacional.
Hoy #2Mar #Caracas me regaló el amanecer más bello con el #Avila en todo su esplendor. Gracias infinitas a todos los venezolanos por su cariño, reconocimiento y afecto. Los llevo a todos en tantos recuerdos hermosos. Mi corazón se queda aquí. Te quiero #Venezuela ??@UEenVenezuela pic.twitter.com/i4dIXpXZ90
— Isabel Brilhante Pedrosa (@EmbajadoraUECCS) March 2, 2021
Europa colonialista
El gobierno venezolano decidió, igualmente, aplicar la medida a la embajadora Isabel Brilhante Pedrosa, luego de que la Unión Europea decidió imponer, unilateralmente, sanciones a 19 integrantes de la Asamblea Nacional; que fueron elegidos por votación popular el pasado 6 de diciembre.
En su momento el canciller Jorge Arreaza expresó que el procedimiento fu adoptado «en contra de la propia voluntad»; al destacar el talante amistoso de la Diplomacia Bolivariana de Paz. Sin embargo, añadió que la defensa de la soberanía nacional es prioridad.
Por su parte, la Unión Europea respondió con una declaratoria similar contra la representante del Gobierno Bolivariano en Bruselas, Claudia Salerno. Así sumó otra represalia contra el pueblo venezolano, sin expresar disculpas o rectificación por la arremetida contra los parlamentarios.