El presidente de la República, Nicolás Maduro, reveló que sectores extremistas dea derecha le pagaron 150 dólares para generar guarimbas y perpetrar ataques en todo el país.
Desde el Despacho Presidencial en el Palacio de Miraflores, el mandatario nacional alertó que la oposición está tratando de «desencadenar una escalada de violencia», para causar daño a la población.
Asimismo, informó que antes de las elecciones presidenciales intentaron llevar a cabo un sabotaje eléctrico en el país, en un intento por desestabilizar el proceso electoral.
Añadió que tiene confesiones de individuos asociados a estos planes, quienes estaban armados y confesaron recibir pagos por sus actos.
«El 80% de los capturados tiene antecedentes penales, y el 90% está en avanzado estado de drogadicción”, afirmó.
El jefe de Estado puntualizó que este grupo de violentos no buscan votos, sino generar guarimbas y ataques dirigidos a centros electorales y sedes del Consejo Nacional Electoral (CNE).
En su alocución, el presidente Maduro comparó lo ocurrido este 29 de julio con el golpe de Estado de Abril 2002 y las acciones desestabilizadoras en 2004.
Ante este escenario violento, el mandatario hizo un llamado a la población venezolana a la tranquilidad y la fortaleza en defensa de la patria.
«Estaba calculando que han impactado cerca de un 10% de lo que hicieron en 2013 con Capriles, en el 2014 con la Machado, Leopoldo López y Antonio Ledezma y en el 2017 con Julio Borges”, aseveró.
Por otra parte, señaló a la oposición de intentar deslegitimar el proceso electoral mediante el uso de «supuestas actas» y de recurrir a tácticas para atacar los centros de votación.
A lo que subrayó que responderán ante la ley por sus acciones. «La extrema derecha quiere desestabilizar a Venezuela nuevamente, pero no lo permitiremos», concluyó Maduro
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