Las cancillerías de la República Bolivariana de Venezuela y la República Oriental del Uruguay anunciaron hoy una decisión conjunta de gran trascendencia para sus ciudadanos, al acordar la reactivación de los servicios consulares en sus respectivas capitales. Este importante paso, fruto del diálogo y el trabajo diplomático, facilitará la atención de las comunidades venezolana en Montevideo y uruguaya en Caracas, normalizando un aspecto fundamental de la relación bilateral.
Este avance representa un esfuerzo deliberado por parte de ambos gobiernos para priorizar las necesidades de su gente. El Ministerio para Relaciones Exteriores de Venezuela confirmó que, «como resultado conjunto entre ambas partes, se ha decidido en los próximos días reactivar los servicios consulares«. Dicha medida garantiza que miles de ciudadanos puedan nuevamente acceder a trámites esenciales, asistencia y protección en el exterior, fortaleciendo los lazos humanos que unen a ambas naciones suramericanas.
Un nuevo capítulo en la relación bilateral
Esta decisión marca un significativo giro diplomático si se considera el contexto del año anterior. Cabe recordar que el pasado 29 de julio, la Cancillería venezolana ordenó el retiro inmediato de todo su personal diplomático de las misiones en Uruguay, así como en Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá y República Dominicana. Esta acción drástica se produjo en un momento de alta tensión política en la región.
En aquel momento, el Gobierno Bolivariano expresó su más firme rechazo ante lo que calificó como «las injerencistas acciones y declaraciones de un grupo de gobiernos de derecha, subordinados a Washington». Además, Venezuela denunció que dichos gobiernos intentaban «reeditar el fracasado y derrotado Grupo de Lima» con el objetivo de desconocer los resultados electorales de los comicios presidenciales del 28 de julio, en los cuales las autoridades electorales proclamaron la victoria del presidente Nicolás Maduro con el 51,95 por ciento de los votos. Ante ese escenario, el gobierno venezolano subrayó que retiraba a su personal como una medida de defensa de su soberanía nacional.
Sin embargo, el anuncio de hoy demuestra un cambio notable en la dinámica bilateral entre Caracas y Montevideo. En un claro contraste con la confrontación pasada, ambos gobiernos eligen ahora el camino del entendimiento y la cooperación pragmática. Esta reactivación no solo representa un alivio tangible para las familias y los individuos que dependen de la asistencia consular, sino que también envía una poderosa señal de que el diálogo constructivo puede superar las diferencias ideológicas y los momentos de mayor crispación política, abriendo una nueva etapa en sus relaciones.