La inteligencia venezolana desmanteló una operación terrorista que pretendía impedir la instalación de la Asamblea Nacional el próximo 5 de enero.
La información la dio a conocer la Ministra de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, la Almiranta Carmen Meléndez, en compañía de los demás jefes de los organismos de seguridad del país.
La funcionaria destacó que esta operación terrorista, y como ha sido invariablemente en los últimos tiempos, fue tramada, entrenada y financiada desde Colombia.
Varios de los implicados han sido ya detenidos, y estos han proporcionado testimonios que dan cuenta de las tareas y misiones que contemplaba este plan; entre ellas la toma de cuarteles militares, robo de armas y agitación de calle.
Se buscan
Las personas en la siguiente galería son parte de los identificados en el plan terrorista en contra de Venezuela; y las cuales son solicitadas por las autoridades del país. Algunas de ellas son presuntos agentes de organismos extranjeros como la DEA.
Conspiración Made in Colombia
Como advirtió el presidente Nicolás Maduro durante su salutación a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, estos ataques tenían contemplado ejecutarse entre los días finales de 2020 y las primeras fechas del 2021.
De acuerdo a lo revelado por la Ministra Carmen Meléndez, esta operación terrorista tenía entre sus objetivos la vulneración del sistema eléctrico Nacional como hicieron en 2019; así como el ataque cibernético de varias empresas estratégicas del estado.
Para esta maniobra contarían un con hacker identificado como Ismael de Jesús Villamizar Quintero; del que sabrían hasta ahora que está ubicado en el estado Trujillo, y quien está siendo rastreado para su arresto.
Oficiales traidores en el plan
El despliegue cívico militar, policial y popular ha sido denominado “Operación Negro Primero II, aplastamiento del enemigo”, la continuación de la estrategia que dio al traste con la operación Gedeón en mayo del año pasado.
La Ministra de Interior Justicia y Paz confirmó la detención de 2 oficiales de la Armada Nacional Bolivariana, quienes estarían emparentados con otros oficiales del componente que están fuera del país e implicados en actividades terroristas anteriores contra Venezuela.
Estos 2 efectivos iban a ser los anfitriones de las reuniones logísticas en el país para finiquitar los detalles de las tareas siguientes que buscaban perpetrar acciones violentas.
Entre los detalles del plan, tenían previsto el ingreso de elementos palaramilitares entrenados en Colombia por los estados fronterizos de Zulia, Táchira, Apure y Bolívar.
Agitar todo el país
Además de apuntar al parlamento como objetivo principal en Caracas, también estaban contempladas acciones en el interior del país con activistas entrenados para agitar sus localidades, como fue el caso de un dirigente del Sindicato de Profesores de la ciudad de Carúpano, estado Sucre.
La Ministra también confirmó la detención de un funcionario jubilado del CICPC en el estado Trujillo, identificado como Rigoberto Moreno Carmona; quien presuntamente tenía la misión la toma de unidades militares en el país.
De los testimonios de los detenidos, se conoció que uno de complejos militares señalados para ser atacados sería el cuartel del Batallón 825 en el estado Carabobo.
Si bien esta operación de “Boicot a la Asamblea Nacional” ha sido neutralizada; la Ministra Carmen Meléndez reiteró a los organismos de seguridad y a la inteligencia popular a seguir en alerta.
“Le pido a la inteligencia popular que no bajemos la guardia”, dijo la funcionaria.
Mientras tanto, el General Gustavo González López, director del Sebin, reiteró que “Tenemos controlada la situación y garantizada la paz”.
La mano de Leopoldo López
Entre los presuntos implicados en el plan terrorista para impedir la instalación del parlamento estaría involucrado el político extremista Leopoldo López.
La Ministra describió que la gira del prófugo de la justicia a Colombia se inscribiría en la serie de contactos para afinar este plan.
Durante la gira, López se reunió no solo con el presidente Iván Duque, el Ministro de la Defensa y la presunta alcaldesa progresista de Bogotá Claudia López, sino también con terroristas venezolanos implicados en la toma violenta de bases militares como fue el caso de Gilberto Martínez Daza, involucrado en el asalto al cuartel Paramacay y la operación «Vuelvan Caras».
