Este domingo la Armada Bolivariana de Venezuela interceptó dos barcos guyaneses, denominados Nardy Nayera y Sea Wolf, que ejercían in fraganti pesca ilegal en aguas de plena soberanía y jurisdicción de la nación bolivariana. Así lo informa un comunicado oficial de la Cancillería venezolana colgado en la cuenta del ministro para Relaciones Exteriores Jorge Arreaza.
«La operación se ejecutó en aguas de indiscutible soberanía venezolana, en pleno respeto a la legislación vigente, garantizando el debido proceso de los tripulantes detenidos», se lee en el texto.
El referido comunicado fue emitido para desmentir declaraciones del gobierno de Guyana, según las cuales sus pesqueros estarían navegando dentro de su Zona Económica Exclusiva. Es así como Venezuela desmiente tal afirmación y agrega que la contraparte «deja al desnudo sus pretensiones unilaterales, en alianza con transnacionales petroleras, particularmente con la estadounidense ExxonMobil, sobre territorio venezolano no controvertido; así como áreas marinas y submarinas pendientes por delimitar».
#COMUNICADO | Venezuela rechaza el Comunicado de la República Cooperativa de Guyana del #24Enero sobre la operación de la Armada Nacional Bolivariana y reitera que no permitirá incursiones ilegales de ninguna clase en su territorio, ejerciendo la defensa de su soberanía. pic.twitter.com/4Q6P5r9pFI
— Jorge Arreaza M (@jaarreaza) January 25, 2021
Guyana incurre en injerencia
A juicio de Venezuela, Guyana además con su más reciente comunicado incurre en una «flagrante intromisión en asuntos internos». Esto porque «incorpora una serie de absurdas y erráticas objeciones a la promulgación reciente de un decreto de ordenación territorial venezolano». Venezuela explica que se trata de una decisión que postula la formulación de políticas públicas para el desarrollo marítimo en territorio exclusivo y no controvertido de la República. Es decir, no es asunto de competencia guyanesa.
Por último, Venezuela reitera sus aspiraciones de relaciones de respeto, cooperación y buena vecindad con la República Cooperativa de Guyana. «Un diálogo sin agendas ocultas para crear un ambiente de entendimiento, dentro del marco del Derecho Internacional y, particularmente del Acuerdo de Ginebra de 1966». Al mismo tiempo reitera que no permitirá incursiones ilegales en su territorio y ejercerá «el sagrado derecho a la defensa de su soberanía».
