El magnate y expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, recientemente confesó en un mitin realizado como parte de su precampaña electoral, que siempre quiso apoderarse del petróleo de Venezuela.
En sus propias palabras, Trump asegura que nadie puede creer, actualmente, que los Estados Unidos hoy esté comprándole petróleo a Venezuela. Así estuvo cargado su discurso desde Carolina del Norte este fin de semana.
Esto porque con soberbia y total arrogancia dijo en estas declaraciones que “Cuando yo me fui, Venezuela estaba a punto de colapsar y pudimos quedarnos con todo ese petróleo y lo tendríamos justo al lado, y ahora compramos petróleo a Venezuela y estamos haciendo a un dictador muy rico, pueden creerlo? nadie puede creerlo”.
Estas declaraciones confirman lo que desde el gobierno venezolano siempre se denunció con respecto a las reales intenciones de la Casa Blanca en la administración de Trump (y también de otras). En todas ellas, apoderarse de los recursos venezolanos como el petróleo, por ejemplo, es su único interés. Sin importar nada, derrocan gobiernos democráticamente electos y hacen pasar hambre a todo un pueblo mediante sanciones y medidas inhumanas para presionar.
La confesión de Trump no sorprende. Solo reafirma que las decisiones tomadas desde el Ejecutivo venezolano con respecto a defender la soberanía, son acertadas y deben mantenerse. Además, constata que quienes se reunieron con Trump, en algún momento, solo pretendieron vender al mejor postor, el petróleo de nuestras tierras.