Las acusaciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra China a propósito de la pandemia no cesan. Este jueves dijo que es posible que Beijing o no pudo contener el brote del covid-19 o dejó que el virus se propagara. Pero mientras Trump señala a China con hipótesis no comprobadas, inteligencia lo contradice.
1. Acusaciones sin pruebas
Trump reiteró este jueves que el nuevo coronavirus se originó en el Instituto de Virología de Wuhan y que tiene «un alto grado de convicción» de que fue así.
Afirmó que no puede decir a la prensa a qué se debe tanta seguridad en sus señalamientos, pero ha visto pruebas que lo corroboran, aunque siga sin mostrarlas.
Sigue culpado a China de la propagación del nuevo coronavirus por todo el mundo, y amenazó con imponer aranceles como medida punitiva. El presidente agregó que EE.UU. no tiene que parar los pagos de deuda al país asiático para que Beijing sienta el peso de las consecuencias.
Volvió a arremeter contra la Organización Mundial de la Salud (OMS) que en su opinión «debería estar avergonzada de sí misma porque es como una agencia de relaciones públicas para China».
2. Wuhan lo niega
El Instituto de Virología de Wuhan niega rotundamente ser el origen del covid-19 y asegura que «no hay forma» de que provenga de su laboratorio.
Científicos chinos aseveran que el virus se transmitió de un reservorio animal a humanos, como fue el caso del brote de la neumonía atípica por el coronavirus SARS-CoV, cuando el origen fue las civetas.
El portavoz del ministerio de relaciones exteriores de China, Geng Shuang, instó la semana pasada a EE.UU. a dejar de culpar a Beijing por la pandemia. «No somos el culpable ni el cómplice del virus».
3. Inteligencia contradice a Trump
Las agencias de inteligencia de EE.UU. refutaron este jueves una teoría conspirativa al afirmar que el nuevo coronavirus «no es artificial ni genéticamente modificado», sin embargo dijeron que siguen estudiando la hipótesis de Trump y sus asesores de que la pandemia podría ser producto de un accidente en un laboratorio chino.
«La Comunidad de Inteligencia coincide con el amplio consenso científico de que el virus del covid-19 no fue fabricado ni modificado genéticamente por el hombre», afirmó la Oficina del director nacional de Inteligencia en un comunicado.
RT/RRV